Con el 2011 prácticamente cocinado, muchos actores ya están pensando en las elecciones generales de 2015, en las que el oficialismo, con Cristina fuera de juego, tiene dos candidatos fuertes, que irán, sin lugar a dudas, por el sillón de Rivadavia: ellos son Daniel Scioli y Amado Boudou. La estrategia actual de ambos y la proyección a futuro. Las trabas en el camino del bonaerense
Con el 2011 prácticamente cocinado tanto a nivel provincial como nacional, muchos actores políticos ya están pensando en las elecciones generales de 2015, en las que el oficialismo, con Cristina fuera de juego, tiene dos candidatos fuertes, que irán, sin lugar a dudas, por el sillón de Rivadavia: ellos son el actual gobernador bonaerense, Daniel Scioli y el ministro de Economía y candidato a presidente, Amado Boudou; aunque pueden sumarse otros.
¿Cuál de los dos recibirá la venia de la primera dama? Esa es la pregunta que se hacen todos. Aunque la mayoría coincide en que el compañero de fórmula de la presidenta será finalmente el agraciado. “En este largo camino, se harán más notorias que nunca las diferencias entre el mandamás bonaerense y la Casa Rosada”, resaltan fuentes cercanas al ex motonauta.
"La idea de Cristina es posicionarlo a Boudou de cara a 2015, y aunque parezca mentira ya lo está haciendo, dice a La Tecla.info un allegado a la gobernación, que pone como ejemplo las recorridas por territorio bonaerense del titular de la cartera de hacienda. "El otro día se floreaba en Tapalqué mostrándose con Coconi y otros intendentes de la zona como si fuera candidato a gobernador", remarcó.
Tampoco cae del todo bien el juego que lleva adelante en distritos como Mercedes, donde dejó de lado al intendente Carlos Selva y se jugó el todo por el todo por el camporista Juan Ignacio Ustarroz. En este caso es necesario destacar que no solo Boudou se metió en el distrito, sino que también lo hicieron Mariotto, Alicia Kirchner, Abal Medina y demás funcionarios.
Dicen que la estrategia del rockero ex titular de Anses es hacer buenas migas en los diferentes municipios. "Esa relación se va a profundizar mucho más entre el segundo y tercer año de gestión como vicepresidente, que es donde se va a lanzar definitivamente como el candidato a la presidencia en 2015", comenta un sciolista allegado a la Rosada, no demasiado contento, por supuesto..
Esta última fuente tiene bien en claro que el camino de su jefe no va a ser fácil, ya que si Cristina se define por Boudou, como todo parece indicar, los beneficios extra coparticipación que lleguen desde Balcarce 50 serán más bien escasos. “No lo veo a Daniel rompiendo del todo, pero se las va a ver negras en varios pasajes de la gestión que se viene”, confiesa el hombre.
Consultado sobre cómo debe mostrarse Boudou en su rol de vicepresidente, el sciolista resalta que “no tiene que ni mostrarse”, y agrega que “está claro que no hay un rol definido en el segundo. Eso sí, va a saber utilizar muy bien ese lugar para su campaña electoral, que aunque algunos dicen que puede ir por la Gobernación, no creo que sea así. Se va a tirar directamente por la presidencia”.
La gobernación será otro tema. Algo seguro es que el candidato no será Daniel Scioli. Con o sin Boudou en una hipotética interna, el ahora mandamás provincial va ir por la presidencia, e intentará romper con eso de que “nunca un gobernador bonaerense fue electo presidente de la nación”. La tarea no será sencilla, más si se tiene en cuenta que todavía no han pasado las elecciones de 2011 y ya empiezan a aparecer trabas para 2015.
¿Cuál de los dos recibirá la venia de la primera dama? Esa es la pregunta que se hacen todos. Aunque la mayoría coincide en que el compañero de fórmula de la presidenta será finalmente el agraciado. “En este largo camino, se harán más notorias que nunca las diferencias entre el mandamás bonaerense y la Casa Rosada”, resaltan fuentes cercanas al ex motonauta.
"La idea de Cristina es posicionarlo a Boudou de cara a 2015, y aunque parezca mentira ya lo está haciendo, dice a La Tecla.info un allegado a la gobernación, que pone como ejemplo las recorridas por territorio bonaerense del titular de la cartera de hacienda. "El otro día se floreaba en Tapalqué mostrándose con Coconi y otros intendentes de la zona como si fuera candidato a gobernador", remarcó.
Tampoco cae del todo bien el juego que lleva adelante en distritos como Mercedes, donde dejó de lado al intendente Carlos Selva y se jugó el todo por el todo por el camporista Juan Ignacio Ustarroz. En este caso es necesario destacar que no solo Boudou se metió en el distrito, sino que también lo hicieron Mariotto, Alicia Kirchner, Abal Medina y demás funcionarios.
Dicen que la estrategia del rockero ex titular de Anses es hacer buenas migas en los diferentes municipios. "Esa relación se va a profundizar mucho más entre el segundo y tercer año de gestión como vicepresidente, que es donde se va a lanzar definitivamente como el candidato a la presidencia en 2015", comenta un sciolista allegado a la Rosada, no demasiado contento, por supuesto..
Esta última fuente tiene bien en claro que el camino de su jefe no va a ser fácil, ya que si Cristina se define por Boudou, como todo parece indicar, los beneficios extra coparticipación que lleguen desde Balcarce 50 serán más bien escasos. “No lo veo a Daniel rompiendo del todo, pero se las va a ver negras en varios pasajes de la gestión que se viene”, confiesa el hombre.
Consultado sobre cómo debe mostrarse Boudou en su rol de vicepresidente, el sciolista resalta que “no tiene que ni mostrarse”, y agrega que “está claro que no hay un rol definido en el segundo. Eso sí, va a saber utilizar muy bien ese lugar para su campaña electoral, que aunque algunos dicen que puede ir por la Gobernación, no creo que sea así. Se va a tirar directamente por la presidencia”.
La gobernación será otro tema. Algo seguro es que el candidato no será Daniel Scioli. Con o sin Boudou en una hipotética interna, el ahora mandamás provincial va ir por la presidencia, e intentará romper con eso de que “nunca un gobernador bonaerense fue electo presidente de la nación”. La tarea no será sencilla, más si se tiene en cuenta que todavía no han pasado las elecciones de 2011 y ya empiezan a aparecer trabas para 2015.
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