Ricardo Alfonsín aseguró que los intendentes de Lomas de Zamora y Tigre competirán en una "interna del PJ" y vaticinó que a futuro "se van a encolumnar" detrás del ganador. También incluyó a miembros de la lista de De Narváez.
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El candidato a diputado nacional por el Frente Progresista Ricardo Alfonsín advirtió hoy que su rival kirchnerista, Martín Insaurralde, y el del Frente Renovador, Sergio Massa, al igual que referentes denarvaístas, "tarde temprano se van a reunir", y advirtió que tanto el intendente de Lomas de Zamora como el de Tigre medirán fuerzas en una "interna del PJ acordada".
"La disputa entre Insaurralde y Massa es una interna acordada en el seno del Frente para la Victoria", insistió en advertir Alfonsín, quien secunda a Margarita Stolbizer en la lista de candidatos del Frente Progresista, en la provincia de Buenos Aires.
En declaraciones a radio 10, el dirigente radical aseguró que tanto el candidato kirchnerista como el jefe comunal de Tigre están "dirimiendo una interna del PJ y cuando comprendan que separados se pone en riesgo la posibilidad de que conserven el gobierno, se van a juntar". Alfonsín insistió en su vaticinio: "Tarde o temprano se van a reunir", remarcó.
"Lo que va a pasar es lo siguiente: se va a saber en esta elección cuál de las tres fuerzas justicialistas es la que tiene mayoría y, a partir de ese conocimiento, se van a encolumnar el resto detrás de la fuerza mayoritaria".
En tal sentido, involucró en su análisis al Frente Unión Celeste y Blanco que lleva como primer candidato a diputado nacional a Francisco De Narváez.
Cuando se le preguntó si De Narváez, su ex aliado en las elecciones de 2009, va a tomar ese eventual camino, Alfonsín respondió: "No él, particularmente, pero algunos de los que están con Francisco pueden dar el paso, de ser necesario, para reunir a todo el peronismo y garantizarse un mejor resultado en 2015".
Alfonsín y Stolbizer hicieron ayer una incursión al partido de Tigre, como parte de la campaña proselitista con vistas a las PASO del 11 de agosto, y advirtieron que "las cosas son como las quiere vender" Massa porque, dijeron, ese distrito "tiene los indicadores sociales más bajos en la región".
También reprocharon a Insaurralde haber conseguido "fama" como intendente de Lomas de Zamora "por sus vinculaciones con la farándula, por pintarle la cara a las ciudades, sonreír y hacer megarecitales. Pero de resolver los problemas a la gente, nada".
Esta mañana, Alfonsín volvió a fustigar el rumbo del Gobierno nacional y habló de "cierta fatiga, cierto cansancio, cierto reclamo de la sociedad acerca de la necesidad de dirigentes más serios en el ejercicio del gobierno, más transparentes, más respetuosos del que piensa diferente; la gente no quiere ver más peleas, quiere que se le resuelvan los problemas".
Al cuestionar el estilo de gestión de la Casa Rosada, el ex candidato presidencial reflexionó que "le vendría bien al Gobierno, para ser un poco más humilde, perder una elección en donde se pusiera en juego la Presidencia, las gobernaciones".
"Porque la sensación de ser invencible, invulnerable -continuó- genera cierta omnipotencia y asociado a la omnipotencia está la falta de humildad, la soberbia y, a veces, el autoritarismo y eso no es bueno ni para una familia, ni para una empresa ni para un país"
"La disputa entre Insaurralde y Massa es una interna acordada en el seno del Frente para la Victoria", insistió en advertir Alfonsín, quien secunda a Margarita Stolbizer en la lista de candidatos del Frente Progresista, en la provincia de Buenos Aires.
En declaraciones a radio 10, el dirigente radical aseguró que tanto el candidato kirchnerista como el jefe comunal de Tigre están "dirimiendo una interna del PJ y cuando comprendan que separados se pone en riesgo la posibilidad de que conserven el gobierno, se van a juntar". Alfonsín insistió en su vaticinio: "Tarde o temprano se van a reunir", remarcó.
"Lo que va a pasar es lo siguiente: se va a saber en esta elección cuál de las tres fuerzas justicialistas es la que tiene mayoría y, a partir de ese conocimiento, se van a encolumnar el resto detrás de la fuerza mayoritaria".
En tal sentido, involucró en su análisis al Frente Unión Celeste y Blanco que lleva como primer candidato a diputado nacional a Francisco De Narváez.
Cuando se le preguntó si De Narváez, su ex aliado en las elecciones de 2009, va a tomar ese eventual camino, Alfonsín respondió: "No él, particularmente, pero algunos de los que están con Francisco pueden dar el paso, de ser necesario, para reunir a todo el peronismo y garantizarse un mejor resultado en 2015".
Alfonsín y Stolbizer hicieron ayer una incursión al partido de Tigre, como parte de la campaña proselitista con vistas a las PASO del 11 de agosto, y advirtieron que "las cosas son como las quiere vender" Massa porque, dijeron, ese distrito "tiene los indicadores sociales más bajos en la región".
También reprocharon a Insaurralde haber conseguido "fama" como intendente de Lomas de Zamora "por sus vinculaciones con la farándula, por pintarle la cara a las ciudades, sonreír y hacer megarecitales. Pero de resolver los problemas a la gente, nada".
Esta mañana, Alfonsín volvió a fustigar el rumbo del Gobierno nacional y habló de "cierta fatiga, cierto cansancio, cierto reclamo de la sociedad acerca de la necesidad de dirigentes más serios en el ejercicio del gobierno, más transparentes, más respetuosos del que piensa diferente; la gente no quiere ver más peleas, quiere que se le resuelvan los problemas".
Al cuestionar el estilo de gestión de la Casa Rosada, el ex candidato presidencial reflexionó que "le vendría bien al Gobierno, para ser un poco más humilde, perder una elección en donde se pusiera en juego la Presidencia, las gobernaciones".
"Porque la sensación de ser invencible, invulnerable -continuó- genera cierta omnipotencia y asociado a la omnipotencia está la falta de humildad, la soberbia y, a veces, el autoritarismo y eso no es bueno ni para una familia, ni para una empresa ni para un país"
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