Se renueva la mitad de la Legislatura bonaerense y el Frente para la Victoria tiene serias intenciones de incrementar sus voluntades. Se sabe que La Cámpora va a jugar fuerte en el armado de las listas seccionales, al igual que en las elecciones pasadas. El que no pinchará esta vez será el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, quien luego de decirle "no" a Cristina, ni siquiera podrá acercarse a la lapicera.
En la Segunda, el nicoleño Marcelo Carignani (elige 5 senadores) podría ser nuevamente el titular de la boleta seccional apoyado por el intendente de su distrito y el sciolismo, desde donde además se apunta el apellido Di Palma (para el corredor Marcos o posiblemente su mamá, “La Tana” María Cayetana). La Cámpora buscará la renovación de Marina Moretti (San Andrés de Giles) y Cecilia Comerio (San Nicolás).Ricardo Casi, intendente de Colón, brega desde hace años por una banca.
Florencio Randazzo tenía pensado pedir el lugar para Francisco Durañona, alcalde de San Antonio de Areco, quien no la tiene fácil en su distrito. Abel Furlán (del PJ de Zárate y dirigente de la UOM de Zárate-Campana) podría ocupar el casillero por la pata sindical, también apoyado en Randazzo. Ahora, las chances de Durañona y Furlán son muy pocas.
En la Tercera (elige 9 senadores), se da prácticamente por descontado que la presidenta del bloque del FpV en el Senado, Cristina Fioramonti (Florencio Varela), será nuevamente candidata. Y también aseguraría su renovación Santiago Carreras (Lomas de Zamora), hombre de La Cámpora y de Gabriel Mariotto. La organización juvenil pedirá algún casillero más.
El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, más allá del lugar que le toque ocupar en el reparto final de candidaturas ejecutivas, pondrá el primero o el segundo en la tira seccional. Su representante ahora es Daniel Barrera y podría repetir. Los jefes comunales concentran en la Tercera su mayor poder y, por lo tanto, tendrán mucha incidencia en la nómina.
A ellos les quedan reservados espacios que hoy ocupan massistas que en 2011 ingresaron por el FpV. Enrique Slezack (Berisso) estará en la nómina. Alejandro Granados (Ezeiza) reclamará para su tropa uno de esos lugares. Aníbal Fernández, sea candidato a Gobernador o no, también quiere tener un alfil en el Senado.
El sciolismo defiende dos bancas: la de Alberto de Fazio (Quilmes) y la de Baldomero Alvarez (Avellaneda); el primero con mayores chances que el segundo para retener la banca. “Cacho” Alvarez tiene inconvenientes para pasar el filtro de Olivos. También pedirá el Movimiento Evita reserva del lugar que hoy ocupa Eduardo “Cholo” Ancona (Avellaneda). En tanto, el ahora ex massista Darío Giustozzi querrá conservar la banca que tiene Patricia Segovia, pero será muy difícil.
En la Cuarta (14 diputados), quizá Chacabuco vuelva a quedarse con la cabeza de la nómina, pero en este caso el elegido por Julián Domínguez será el actual intendente, Mauricio Barrientos. El diputado Darío Golía vuelve a postularse como jefe comunal. También Domínguez pretende poner a Miguel Angel Recalde (Alberti), su secretario general de la Cámara de Diputados, si es que no compite por la intendencia.
En la Quinta (11 diputados), quienes encabezaron la lista en 2011, el randazzista Germán Cestona (General Belgrano) y el histórico Juan de Jesús (La Costa), esperan una buena señal para volver. También con esa expectativa está el sciolista Rodolfo “Manino” Iriart (General Pueyrredón), actualmente de licencia y reemplazado por Cristian Arroyo.
El lugar de La Cámpora está en manos de Fernanda Raverta, y volverá a ser de ella en caso de que no sea elegida Defensora del Pueblo de la Provincia. La agrupación juvenil pretende más representación en esta sección. El intendente de Pueyrredón, Gustavo Pulti, juega en el oficialismo y pretenderá mantener su espacio legislativo que actualmente ocupa María Alejandra Martínez.
Lo cierto es que a Bahía Blanca le corresponde, por peso electoral, el primero o el segundo lugar. ¿Se lo quedará La Cámpora con Federico Susbielles?. El interventor de la Confederación Argentina de Básquetbol hace tiempo que busca un destino legislativo. También amparado en la organización juvenil centra sus deseos de renovación Jorge Ruesga (Coronel Pringles).
El sciolismo quiere colocar también un nombre allí, aunque los lugares a entrar son reducidos. Hugo Corvatta (intendente de Saavedra) siempre coqueteó con volver a la Legislatura, pero finalmente irá por un nuevo mandato. Eso sí, quizá eloija un nombre para la nómina. El bahiense Luis Calderaro, soldado de Mariotto, también sueña con una banca.
En la Séptima (elige 6 diputados), la vuelta de José Eseverri a las filas del kirchnerismo rompió cierto orden establecido, tanto en la influyente Olavarría como en la sección. El acuerdo en esa ciudad tendrá mucha ingerencia en la lista. Podría quedarse con la cabeza de la nómina el camporista César Valicenti, mientras que el ultra K Walter Abarca, referenciado en Julián Domínguez, también estaría primero o segundo.
El sciolismo tiene dos bancas: la de Alicia March (Bolívar), esposa del armador Isidoro Laso, y la de Marín Ferré, por cuya licencia está el randazzista Mario Caputo. Difícilmente pueda conservar ambos escalones. ¿Qué lugar le corresponde al espacio olavarriense de Alicia Tabarés, que tiene a su hijo José González Hueso como postulante a la intendencia y juega con el sciolismo?. Se verá a la hora de poner el gancho.
En la Octava (elige 3 senadores), el intendente Pablo Bruera ya le hicieron llegar el mensaje de que la lista de senadores por la Octava se armará en la Casa Rosada o en la calma de Olivos, cerca de las 24 horas del 20 de junio. El oficialismo espera meter entre uno o dos legisladores para la Cámara Alta de los tres que se ponen en juego. En la capital bonaerense se calcula que esa nómina estará copada por dirigentes de La Cámpora.
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