vez protagonista en las redes sociales. A través de una serie de
enigmáticos mensajes apuntó contra la dirigencia política del país
, sin distinción de banderas políticas, por lo que se interpreta que
los dardos tuvieron varios destinos, incluso puertas adentro del
gobierno
La pandemia del coronavirus trastocó los planes del oficialismo en
todos sus niveles, pero también comenzó a hacer mella puertas aden
tro. Días atrás fue noticia el cruce entre los ministros de Seguridad de
Provincia, Sergio Berni, y de Nación, Sabina Frederic, a raíz de un re
clamo del funcionario bonaerense en el que manifestaba no tener
ningún tipo de apoyo del gobierno nacional.
No conforme con eso, poco después recurrió a la épica de comparar
se con un prócer de la Nación al afirmar que "Si a Belgrano le hubie
sen dado los ponchos, los alimentos y las armas que necesitaba para
su tropa, otro hubiera sido el resultado de la batalla de Vilcapugio.
Casi el 40% de los argentinos habitan la Pcia. de Bs. As. Esa es la res
ponsabilidad que gestiono".
Ahora, Berni volvió a prender el ventilador desde su cuenta de Twitter,
donde a través de una catarata de mensajes, disparó contra propios
y ajenos. Con la excusa del aniversario de la muerte de Güemes, el fun
cionario abrió un hilo que derivó en mensajes encriptados hacia varios
destinatarios.
El ataque español en el norte y los ataques civiles del cabildo salteño conservador, junto a la indiferencia del poder central, lo catapultaron a ser el más hábil gaucho militar de la historia de nuestra independencia.
Este soldado de la Patria lo saluda con Honor MI GENERAL!
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"Salir del coro de obsecuentes tiene sus consecuencias: San Martín
murió en el exilio, Belgrano olvidado y Güemes asesinado por la es
palda. Sin embargo, la decisión de enfrentarse al invasor y a las mez
quindades del poder central, los convirtieron en los padres de la
Patria", apuntó el ministro.
En la misma sintonía, Berni agregó: "Honremos nuestro pasado si
queremos construir un futuro digno. El fortalecimiento de una Na
ción requiere de hombres y mujeres de coraje que, sin dobleses,
obsecuencias o especulaciones, sepan ponerse al frente de las bata
llas decisivas. La historia de la Patria no la escribieron los tibios doc
tores académicos desde un escritorio, sino quienes dejaron su san
gre en el campo de batalla".
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