Cristina Kirchner será candidata presidencial de un frente que enca
bezará el peronismo junto a diversos sectores políticos. Desde Sergio
Massa a Pino Solanas, el rol de la Iglesia, los intendentes y los
gobernadores. A un año del ballotage, por qué está más cerca de
ser una realidad esta unidad opositora.
Cristina Fernández de Kirchner será la candidata presidencial del
frente que encabezará el peronismo y conformarán varios sectores
políticos cercanos (y no tanto) al kirchnerismo, pensando en la pró
xima contienda electoral de 2019 donde enfrente estará el presidente
Mauricio Macri, quien anticipó su ambición de ir por la reelección.
Sólo una crisis aún más severa podría generar otro escenario y nue
vos protagonistas.
La principal fuente de ilusión de dirigentes peronistas con poder, in
tendentes y gobernadores es que finalmente Cristina acepte ser
candidata a presidenta. Todos dentro del peronismo cada día están
más seguros que esto al fin suceda. De todas formas, Cristina
Kirchner mantendrá la incógnita hasta el último instante del
sábado 22 de junio de 2019, cuando vence el plazo para la presen
tación de listas de precandidatos para las PASO que serán el domin
go 13 de agosto del año que viene.
Pese a los recelos que había en los comienzos de los contactos
entre los distintos sectores peronistas, son cada vez más frecuen
tes las charlas y análisis entre Sergio Massa y el diputado Máximo
Kirchner, el hijo de Cristina que oficia de vocero y armador de un
amplio espacio de unidad justicialista, especialmente en territorio
bonaerense. Otro “camporista” es quien acerca posiciones con el
massismo: Eduardo “Wado” De Pedro. El mercedino logró que
CFK se junte con Facundo Moyano, quien armó bloque propio con
Felipe Solá tras distanciarse del sector del ex candidato a presi
dente en 2015 en el Congreso Nacional.
A pesar del distanciamiento que se produjo con Massa tras su
salida como jefe de Gabinete, para el tigrense Cristina ya no es
alguien imposible para compartir un espacio. E incluso llegado el
caso las diferencias podrían resolverse en una interna mediante
la utilización de las PASO. No obstante, si Cristina decide ser can
didata a presidente, Massa está dispuesto a dejarle el espacio
principal a la ex mandataria. Según los números que manejan dentro
del peronismo, sacando a la actual senadora Nacional, es Massa el
único candidato que aparece hoy con dos dígitos en los análisis
de las encuestas.
Pese a que habitualmente aparecen notas en medios que dejan
trascender que Cristina no será candidata, los intendentes bonae
renses peronistas, principales sostenes de CFK candidata, no
tienen dudas que será la cabeza de la boleta del partido en 2019.
“Cristina va a ser candidata y le va a ganar a Macri”, repiten en
sintonía. Y el dato es que en Cambiemos lo saben y tienen encues
tas (que no muestran) en las que Cristina aparece por encima del
presidente Mauricio Macri, e incluso con más intención de voto
que la gobernadora de la Provincia, María Eugenia Vidal. Claro que
esas encuestas no trascienden y son guardadas bajo siete llaves
en algún armario protegido y blindado de la Casa de Gobierno.
Incluso, Cristina ya trabaja moldeando lo que será su plataforma
electoral y mantiene permanentes reuniones con Axel Kicillof, más
el aporte de un equipo económico cuyos miembros no trabajaron
en su último mandato. En todo este armado tiene un rol muy
importante Alberto Fernández, quien además de tejer el primer
contacto con Massa es quien tiene línea directa con Florencio
Randazzo, el dirigente que el año pasado se atrevió a enfrentar
a Cristina en las Legislativas y que en silencio y sin cámaras con
tinúa recorriendo la Provincia con un bajo perfil, y hasta se espe
cula que esta vez sí podría aceptar un ofrecimiento para ir de can
didato a gobernador, aunque en el kirchnerismo duro no le perdo
nan sus actos de rebeldía y lo tildan de “traidor”.
O será Felipe Solá, quien ya sabe lo que es gobernar territorio bo
naerense y que en 2007 se quedó con las ganas de ser reelecto,
cuando surgió Daniel Scioli en Provincia. Es más, Felipe les resul
ta más amigable al círculo íntimo de Cristina que Florencio,
esquivo en varias oportunidades aunque un ministro fiel en los
8 años de gestión cuando le tocó estar al frente de Interior y luego
también de Transporte, de manera simultánea. Ese mismo grupo
ve también con buenos ojos que Solá sea candidato a vice de
Cristina el año que viene.
Por lo pronto para marzo de 2019 ya tienen planeado la foto entre
CFK y Massa como para ir calentando el calendario electoral en
un año que será movido en todos los frentes. “No hay que atacar
lo a Sergio”, ordenó la senadora, que está jugando estratégicamen
te para volver con fuerza al sillón de Rivadavia. Porque más allá
de los nombres para la Provincia, hay algo que es seguro, y es
que salvo un imponderable, Cristina Fernández de Kirchner será
la candidata a presidente del peronismo en las elecciones de 2019.