Jorge Macri y Jaime Méndez aparecen más plantados, al igual que el
radical Gustavo Posse. Los demás jefes comunales macristas del AMBA,
si bien se declararon contrarios a la vuelta de la virtualidad por 15 días
se quedaron solamente en las palabras. Las posturas de cada uno de los
protagonistas
El Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se plantó ante
Nación -algunos dicen que por la presión de Macri y Bullrich- y se presen
tó ante la Justicia para que las clases en la Ciudad continúen de manera
presencial a partir del lunes, contrariamente a lo que señala el DNU de
Nación, que ordenó el regreso a la virtualidad por 15 días con el fin de
evitar la propagación del Covid.
También se lo expresó en el cara a cara que mantuvo con el presidente
Alberto Fernández.
¿Y en la Provincia, qué intendentes se la juegan y lo acompañan? Algu
nos sí, otros no. La cosa está dividida. Uno de los primeros en seguir
los pasos del "Pelado" fue el mandamás de Vicente López, Jorge Macri,
quien vale decir, viene bastante cruzado con el 2 de la CABA, Diego
Santilli.
Lo cierto es que el primo de Mauricio presentó ayer un amparo en la
Justicia bonaerense para intentar frenar la suspensión de las clases
presenciales entre el 19 y el 30 de abril que dispuso el Ejecutivo Nacio
nal. "Como gobierno tengo un poder que es la Justicia. No planteo una
rebeldía, porque las normas están para ser respetadas. Voy a tratar de
hacer lo que esté a mi alcance para garantizar que lo que no enferma,
como las clases presenciales, continúe", sostuvo el jefe comunal.
A la vez, aclaró que el pedido judicial es por la presencialidad en las es
cuelas y no tiene que ver con las restricciones de circulación durante la
noche. "Se que en la nocturnidad desordenada e ilegal sí ha subido el ni
vel de contagio. Pero para eso en Vicente López vamos a entregarles a
los gastronómicos, salones de fiestas y gimnasios un subsidio no reinte
grable de 40 mil pesos para que puedan seguir subsistiendo", explicó Jor
ge Macri.
Por su parte, el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, firmó ayer el De
creto 521/2021 donde declara que la educación es un servicio público
esencial en el distrito. En ese decreto, instruye a la Secretaría de Inspec
ciones y Registros Urbanos del Municipio a “continuar trabajando junto
a la Dirección de Epidemiología de Salud Pública, así como lo hizo duran
te todo el año pasado, en la ampliación y actualización de los protocolos
sanitarios para que las clases puedan seguir impartiéndose de manera
presencial”.
Además,tal como informó Qué pasa web- el decreto instruye a la Dirección
General de Educación del Municipio a “proseguir con las reuniones y el
trabajo que viene realizando” con las autoridades de las escuelas de ges
tión privada y con las autoridades provinciales para las escuelas de gestión
pública, para que pueda continuar la presencialidad en las aulas de todos
los colegios de San Isidro.
“De esta manera, el Municipio seguirá llevando adelante todas las me
didas que estén a su alcance para que los chicos y chicas puedan vol
ver a clases lo antes posible”, indicaron desde la comuna.
En tanto, también mediante un decreto, el intendente de San Miguel,
Jaime Méndez, declaró como “esenciales e imprescindibles los servi
cios educativos destinados a niños, niñas y adolescentes que depen
den de la administración municipal”, para de esta forma llevar adelante
su decisión anunciada ayer de que no cerrará los Centros de Desarro
llo Infanto Familiar (CDIF) municipales.
San Miguel cuenta con ocho CDIF, ubicados en distintos barrios, que
“seguirán funcionando de manera presencial y con estrictos protocolos”
había anticipado el jefe comunal en un desafío al decreto del presidente
Alberto Fernández.
“Creemos que la salud y la educación de cientos de niños que concurren
a nuestros centros infantiles no pueden esperar. Y si bien lo que respecta
a escuelas y jardines de infantes es competencia provincial, entendemos
que deben sostenerse las clases presenciales en todos los niveles”,
expresó Jaime Méndez.
“Sobre todo teniendo en cuenta que venimos de un año entero sin clases,
con los perjuicios que eso conlleva. Y valorando, además, el enorme
esfuerzo que hizo y sigue haciendo la comunidad educativa en salir ade
lante, tomando todos los cuidados y protocolos”, manifestó el jefe co
munal.
En ese marco, el decreto cita un estudio de la Revista Cubana de Pedia
tría, titulado “Salud mental en la infancia y adolescencia durante la pan
demia Covid-19”, donde se señala que la interrupción de las clases pre
senciales afecta el desarrollo físico, psíquico y social del aprendizaje,
del comportamiento y por ende de la salud mental de los chicos, indicó
la comuna.
Por el momento son estos tres los jefes comunales amarillos que decidie
ron dar un paso firme en torno a la presencialidad, acompañando, si se
quiere, la decisión de Horacio Rodríguez Larreta. El resto prefirió quedar
se solo en gestos declarativos. Quejas, reclamos. Pero no mucho más.
Por caso, el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, visitó las instalacio
nes de la escuela Jacarandá en Lanús Este y entregó un subsidio de re
greso seguro a las aulas, que será utilizado para la compra de insumos
que permitan cumplir con los protocolos establecidos. Además, el jefe
comunal entregó un pack de 50 libros para la biblioteca y anunció la en
trega de manuales para docentes y estudiantes del nivel primario de esa
institución.
“Estamos llevando adelante un programa para acompañar las escuelas
con una ayuda económica para la compra de elementos de protección
personal para el personal de la escuela y garantizar la higiene en las
aulas” indicó Grindetti y agregó: “Los dirigentes tenemos que trabajar
para garantizar la presencialidad en las aulas, claramente la escuela es
un ámbito seguro y donde se respetan los protocolos sanitarios”. No
mucho más que eso.
También se mostraron enojados el mandamás de La Plata, Julio Garro y
el de Tres de Febrero, Diego Valenzuela. Sin embargo, por el momento,
no accionaron para impedir la vuelta a la virtualidad. Sólo palabras. "Un
aula vacía no es un aula, es nada, cuál es el mensaje que le damos a la
sociedad con estas medidas?”, se preguntó, por ejemplo, el mandamás
de la capital provincial.