Macri la frenó, pero se aprobó antes que se fuera por iniciativa de Lipo
vetzky y el Senado la convirtió en ley el año pasado. "No le sirvió ni al
inquilino ni al propietario".
María Eugenia Vidal anticipó que ni bien asuma en su banca como dipu
ada nacional buscará derogar la ley de alquileres sancionada el año pa
sado, luego de aprobarse en noviembre de 2019 con respaldo de una par
te del bloque del PRO, porque no ayudó a bajar los precios y restringió
la oferta.
"Fue un error porque no ayudó ni al inquilino ni al propietario. Además, se
agravó porque el Gobierno nos mintió, nos dijo durante todo el año pasado
que no íbamos a pagar aumento. La política se tiene que hacer cargo
cuando comete un error. Hoy están perdiendo todos con esa ley", sostu
vo la ex gobernadora en diálogo con La Nación +.
Omitió el respaldo de varios de sus futuros compañeros de bloque, que
después de la derrota de Mauricio Macri en las elecciones cedieron ante
la presión de las asociaciones de inquilinos y destrabaron el proyecto
que había llegado del Senado tres años antes.
El encargado de reescribirlo fue Daniel Lipovetzky, diputado nacional
del PRO y presidente de la Comisión de Legislación General en ese enton
ces, que consiguió respaldo de una parte de su bloque, pero no de todos:
algunos se abstuvieron o se ausentaron. Cambiemos no participó de la
sesión del Senado que sancionó la ley, en rebelión por temario de la se
sión. No hubo voces en contra.
La ley de alquileres estira de dos a tres años los contratos y pone reglas
claras para actualizar los valores: sólo podrán ser anuales e indexados
a una fórmula que combina el índice de precios al consumidor (IPC) y la
remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE).