"El rey de la carne" blanquea su participación en la estructura sciolista y defiende la candidatura presidencial del GObernador. Cuestiona algunas medidas del Ejecutivo nacional y también habla del campo
“No tendría que ser, lo es”, dice Alberto Samid, y casi salta de su silla. Así reacciona cuando se le pregunta por su amigo Daniel Scioli, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, y la posibilidad de que sea el candidato a Presidente por el FpV.
-Usted dice que lo es, pero el kirchnerismo no le dio espacio en las listas. -Yo no quiero hablar de eso, pero, sin ninguna duda, no sólo los peronistas, los argentinos tenemos un solo candidato, y se llama Daniel Scioli, porque está a la cabeza de todo.
-Pero los diputados nacionales del FpV no dicen lo mismo.
-Algunos, muy poquitos; cada día son menos los que hablan de esa manera, ya se han dado cuenta de que Scioli es un hombre real, que juega para el Gobierno nacional.
-Que les generará resistencias.
-Creo que les generaba, porque las mismas personas que en su momento lo criticaban hoy tienen palabras de alabanza hacia él; todos esperaban que él traicionara a todos, porque lo tentaban tanto para irse. Y eso que Scioli sabía perfectamente que si hacía una alianza con Massa llevaba más del 70 por ciento de los votos.
-Pero no se fue.
-No, priorizó el conjunto y ser un hombre leal a mirar su futuro personal. Alguien que cumple su palabra llama la atención, asombra.
-Entonces, usted cree que va derecho a la Presidencia.
-Sí, y ustedes ni se imaginan el bien que le va a hacer Daniel Scioli al país al ser Presidente. Tiene un conocimiento internacional, de lo que nos pasa a los argentinos, cuáles son los problemas para que cada diez años nos caigamos. El dice que nos hacen mucho daño estas elecciones intermedias, que le damos el apoyo a un gobierno y a los dos años se lo sacamos. Y eso es muy malo, porque, si bien es cierto que si le sacamos el apoyo le va mal al gobierno, también nos va mal a todos los argentinos. Para Scioli no tendría que haber elecciones intermedias, deberíamos votar un gobierno por cuatro años y bancarnos esos cuatro años; si luego falló, cambiarlo, y si no, darle una reelección.
-¿Usted tiene mucha confianza con Scioli?
-A veces nos juntamos. No soy asiduo concurrente a Villa La Ñata, soy uno más del grupo. Tengo el privilegio de que me haya nombrado asesor ad honórem en ganadería; en cuanto hay un problema en ganadería, me consulta.
-¿Fue Scioli quien se lo pidió?
-Sí, nos sentamos a charlar y me dijo: “Bueno, a partir de ahora quiero que me asesores en todos los temas de ganadería que necesite”.
-Eso fue hace mucho.
-No, hará unos tres meses.
-¿Y qué le sugirió hasta el momento?
-Siempre, cuando se preguntaban qué había pasado con la ganadería, que perdimos diez millones de cabezas, me consultó, y yo le expliqué que se perdieron porque los ganaderos se fueron a sembrar soja. No es que el Gobierno impuso una medida que alteró todo. La soja valía más, y en esto, cada uno hace lo que quiere; entonces, muchos ganaderos prefieren sacar las vacas del campo y sembrar soja.
-¿Y no se supone que eso es algo malo?
-No, porque es una decisión de cada productor; además, en este último tiempo hemos logrado recuperar cinco millones de vacas más.
-Pero menos de las que había.
-Igual, le digo, cuando teníamos más vacas nunca llegamos a tener cincuenta millones de toneladas de soja. Hemos logrado este año una cosecha histórica. La Presidenta dijo 105 millones de toneladas, pero para mí son 150, porque ahí no se tuvo en cuenta el silo de maíz, que fueron casi 50 millones de toneladas; es decir, una gran cosecha. Y en ese lugar donde hoy se pudo sembrar, estaban las vacas. Si bien es cierto que ahora tenemos cinco millones menos, también tenemos que decir que hay 150 millones de toneladas de cereal en la producción.
-Yendo a la Provincia, ¿cómo la observa este año, luego de un 2012 donde casi no se podían pagar los sueldos?
-La veo muy bien. El gobierno estuvo bárbaro en modificar impuestos para cobrarles a los que hacía rato no pagaban, a los sectores de mayores recursos; con eso se han conseguido más recursos. Por-que está claro que sin los fondos que le recortaron a la Provincia, como el fondo del Conurbano, era muy difícil afrontar el año. Sin embargo, todos los meses la gente cobra su salario, su aguinaldo, todo con normalidad. Como un milagro, pero no lo es; se trata simplemente de una buena gestión.
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