La vicepresidenta del Parlamento Europeo, Eva Kaili, pasó de
ser la estrella de la Eurocámara a la protagonista de unos de los
escándalos de corrupción más resonantes del mundo.
La ex presentadora de TV griega de 44 años está imputada por
las autoridades belgas bajo los cargos de corrupción y blanqueo
de capitales en una trama pagada por Qatar.
El escándalo explotó luego de meses de investigación y coin
cide con el Mundial de Fúltbol.
La socialdemócrata que ejerce como eurodiputada desde 2022
no pudo disfrutar de sus fueros porque, explicó la fiscalía
belga, la encontraron en flagrante delito, con bolsas llenas de
dinero en efectivo escondidas en su casa.
La investigación, llevada a cabo por un juez belga durante cua
tro meses, examina un presunto delito de “corrupción” y otro
de “blanqueo de dinero” en banda organizada.
“Hay sospechas de que un país del Golfo” intentó influenciar
“en decisiones económicas y políticas del Parlamento Europeo”,
indicó la fiscalía. Aunque la fiscalía evitó identificar al país, una
fuente próxima del caso confirmó a la AFP que se trata de Qatar.
Los beneficiados por ese presunto soborno eran dirigentes “con
una posición política o estratégica significativa” en el Parlamento.
La fiscalía tampoco identificó a los otros detenidos, pero tras
cendió que se trataría de su pareja, el ex eurolegislador socialis
ta italiano Pier-Antonio Panzeri, quien ocupó un escaño en el Pa
rlamento Europeo entre 2004 y 2019; el recién elegido presiden
te de la Confederación Internacional de Sindicatos, Luva Visen
tini, y un lobista cuya identidad no ha trascendido.
Hasta ahora se realizaron 16 requisas en la capital belga, en las
que se incautaron equipos informáticos, teléfonos celulares y
600.000 euros en efectivo.
Estos regalos por parte de los qataríes habrían estado ligados
a la voluntad del país de mejorar su imagen en lo que concier
ne a los derechos humanos y el trato dado a los trabajadores
migrantes, en medio de múltiples polémicas que se han desata
do por las muertes de empleados en los últimos años en el país,
desde que fue designado como anfitrión del mundial.
Poco antes del inicio del Mundial de fútbol, Kaili se había reu
nido en Qatar con el ministro de Trabajo del emirato, Ali bin
Samikh Al Marri. Entonces, la representante griega destacó el
compromiso de los dirigentes qataríes para “continuar con
sus reformas de las condiciones de trabajo”, según un tuit del
embajador de la UE en Doha, Cristian Tudor.
“El Mundial de Qatar es una demostración concreta de cómo la
diplomacia deportiva puede impulsar la transformación históri
ca de un país”, aseguraba Kaili en el hemiciclo de la Eurocáma
ra el 22 de noviembre.
Numerosas ONG acusaron a Qatar de imponer condiciones labo
rales muy precarias a centenares de miles de trabajadores mi
grantes, procedentes de Asia o África.
El diario británico The Guardian reveló en febrero de 2021 que
desde 2010, fecha de atribución del Copa del Mundo al emirato,
6.500 trabajadores extranjeros perdieron la vida en Qatar.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT), que lamentó la
falta de datos sobre esta cuestión, informó de cincuenta acciden
tes laborales mortales y de 500 trabajadores que resultaron heri
dos de gravedad en 2020.
Sin embargo, Kaili declaraba días atrás que “Qatar es un ejemplo
a seguir en materia de derechos laborales”
Antes de ocupar una vicepresidencia en el Parlamento Europeo,
la griega Kaili fue diputada en el Parlamento de Grecia por el
PASOK (Movimiento Socialista Panhelénico) entre 2007 y 2012.
Desde 2014 es eurodiputada y en 2022 logró una de las 14 vice
presidencias de la Eurocámara.