La prepaga Swiss Medical, cuyo dueño Claudio Belocopitt sería uno de los aportantes para levantar la quiebra de la imprenta por la que se invesitga a Amado Boudou, no acepta los billetes de cien pesos que imprimió el Gobierno de Cristina Kirchner. Alegan que los Evita “tienen problemas de seguridad”. Ya tuvo conflictos con los clientes.
A más de cuatro meses de su puesta en circulación, los billetes de cien pesos con la imagen de Eva Perón que imprimió el gobierno de Cristina Kirchner todavía no convencen a algunos empresarios.
La irrupción del billete les trajo muchos problemas a los jubilados bonaerenses. A fines del año pasado, unos 250 mil beneficiarios del Instituto de Previsión Social de la provincia (IPS) fueron los primeros en cobrar en Evitas y en tener dificultades para que sus billetes fueran aceptados en los comercios.
Ahora, el rechazo a los billetes de Evita todavía se mantiene no sólo en algunas comercios chinos del Conurbano sino en grandes compañías como Swiss Medical, la empresa prepaga de Claudio Belocopitt.
Lo curioso es que Belocopitt habría tenido una generosa participación en el depósito inicial de 567.000 pesos en efectivo para levantar la quiebra de la ex imprenta Ciccone, la encargada de imprimir 500 millones de billetes, por la que es investigado el vicepresidente Amado Boudou.
El rechazo a los Evita ya le trajo inconvenientes a Swiss Medical. Ayer, en la sucursal porteña que tiene en avenida Pueyrredón, casi Arenales, se vivió una escena de tensión luego de que los empleados les advirtieran a los clientes que no aceptarían billetes con la imagen de Evita.
Fuentes presentes en el altercado señalaon a LPO que los gritos e insultos se repitieron durante la mañana. La justificación que daban los empleados de Swiss Medical se anclaba en que la compañía recaudadora que utiliza Belocopitt no recibe los billetes de Evita, porque "tienen problemas de seguridad".
Las fallas del billete impreso por el Gobierno nacional ya habían propiciado que los Evitan no pudieran ser entregados en los cajeros automáticos.
La irrupción del billete les trajo muchos problemas a los jubilados bonaerenses. A fines del año pasado, unos 250 mil beneficiarios del Instituto de Previsión Social de la provincia (IPS) fueron los primeros en cobrar en Evitas y en tener dificultades para que sus billetes fueran aceptados en los comercios.
Ahora, el rechazo a los billetes de Evita todavía se mantiene no sólo en algunas comercios chinos del Conurbano sino en grandes compañías como Swiss Medical, la empresa prepaga de Claudio Belocopitt.
Lo curioso es que Belocopitt habría tenido una generosa participación en el depósito inicial de 567.000 pesos en efectivo para levantar la quiebra de la ex imprenta Ciccone, la encargada de imprimir 500 millones de billetes, por la que es investigado el vicepresidente Amado Boudou.
El rechazo a los Evita ya le trajo inconvenientes a Swiss Medical. Ayer, en la sucursal porteña que tiene en avenida Pueyrredón, casi Arenales, se vivió una escena de tensión luego de que los empleados les advirtieran a los clientes que no aceptarían billetes con la imagen de Evita.
Fuentes presentes en el altercado señalaon a LPO que los gritos e insultos se repitieron durante la mañana. La justificación que daban los empleados de Swiss Medical se anclaba en que la compañía recaudadora que utiliza Belocopitt no recibe los billetes de Evita, porque "tienen problemas de seguridad".
Las fallas del billete impreso por el Gobierno nacional ya habían propiciado que los Evitan no pudieran ser entregados en los cajeros automáticos.