La Cámara en lo Civil y Comercial de San Isidro confirmó la perimetral
que le prohíbe a Fabián Tablado, el femicida que en 1996 asesinó de
113 puñaladas a su novia Carolina Aló, acercarse a menos de 300 kiló
metros del padre de su víctima y ahora debería confirmar otro domici
io dónde instalarse.
Cabe recordar que Tablado había solicitado radicarse en la localidad de
San Clemente del Tuyú. Sin embargo, el rápido accionar de los vecinos
y vecinas que se movilizaron para oponerse a esta posibilidad; el apoyo
del intendente Cristian Cardozo quien se presentó ante la justicia para
que rechace la posibilidad de que el femicida se mudara al Partido de La
Costa y el acompañamiento que se le dio desde el Municipio a Edgardo
Aló dieron sus frutos y Tablado solicitó volver a vivir en la casa de sus
padres en Tigre donde hace 26 años cometió aquel crimen.
Con la ratificación de la perimetral de 300 kilómetros, el femicida no po
drá volver a Tigre, ni tampoco instalarse en el Partido de La Costa.
Tablado–quien posee una tobillera electrónica que monitorea sus movi
mientos para controlar la perimetral-, se encuentra actualmente en la ciu
dad santafesina de Cañada de Gómez, y la Justicia lo intimó a responder
si ese será su sitio de residencia permanente o si es sólo provisorio, in
formó Télam.
El fallo, al que tuvo acceso la agencia de noticias nacional, es de la Sala
I del mencionado tribunal, integrada por los jueces Analía Inés Sánchez
y Hugo Llobera, y es la respuesta a una apelación que la defensa de
Tablado realizó cuando el Juzgado de Familia 5 de Tigre le rechazó la
posibilidad de acotar a 500 metros y a solo 30 días el rango y el plazo
de la perimetral que tiene con Edgardo Aló, padre de Carolina.
En su apelación, Tablado sostenía que “jamás perturbó, amenazó ni in
timidó al denunciante (Aló) y que hace más de 30 años que no posee nin
gún tipo de vínculo” con él.
Además, decía que la perimetral de 300 kilómetros “viola los derechos
humanitarios que contempla la Constitución Nacional y los Tratados
Internacionales, toda vez que se funda en la mera denuncia de Aló que
tiene como único objetivo que éste no pueda rehacer su vida”.
Por su parte, Aló, a través de su abogado Ignacio Iúdica, planteó que
desde que salió de prisión Tablado “no tuvo intenciones de actuar de
buena fe”, y prueba de ello es que fue condenado por dos hechos de
“desobediencia” al violar en 2020 las perimetrales que tenía con él y
con sus propias hijas mellizas.
Por ello, pidió que se mantenga la perimetral de 300 kilómetros “para
preservar el derecho de las víctimas, evitando que tengan que sufrir
actos que generen una nueva afectación de su integridad”.
En su resolución, los camaristas recordaron que este caso fue catalo
gado como de “alto riesgo” y que en este tipo de causas “basta la sos
pecha del maltrato, ante la evidencia física o psíquica que presente la
víctima y la verosimilitud de la denuncia que se formule, para que el
juez pueda ordenar medidas que, en su esencia, son verdaderas cau
telares”.
“Por lo tanto, en virtud de todo lo expresado entiendo que correspon
de confirmar la resolución apelada, con costas al apelante en su con
dición de vencido”, señaló la jueza Sánchez en su voto, que contó
con la adhesión de su colega Llobera.
De esta manera, se mantiene la perimetral de 300 kilómetros y por
12 meses que a principios de este mes la jueza Mónica Urbancic de
Baxter, a cargo interinamente del Juzgado de Familia 5 de Tigre, le
había impuesto a Tablado en función del domicilio real en San Fer
nando y el laboral en Tigre de Aló padre.
FUERA DE PRISIÓN
Desde su última salida de prisión –en diciembre de 2021 cuando ter
minó de cumplir un año de cárcel por violar perimetrales-, el femicida
se había ido a vivir a la ciudad cordobesa de Bell Ville a la casa de
una nueva novia.
Pero el 29 de julio, Tablado fue denunciado en Bell Ville por sus veci
nos, cuando escucharon una discusión que tuvo con su ahora expa
reja, que derivó en el arribo de la Policía al domicilio, la expulsión del
denunciado del hogar, una perimetral y su mudanza a un hotel de la
ciudad cordobesa, aunque luego la joven no instó ninguna denuncia
penal por violencia de género.
Rota su nueva relación, Tablado le informó al juzgado su intención de
mudarse a una vivienda de su familia en la ciudad de San Clemente
del Tuyú, en el Partido de la Costa, pero se hicieron marchas de repu
dio y fue declarado “persona no grata” por el Concejo Deliberante y
Cardozo presentó su rechazo a la justicia.
De esta forma, nunca llegó a La Costa y se asentó hace unos días en
un apart hotel de Cañada de Gómez, provincia de Santa Fe, desde don
de volvió a pedir la posibilidad de vivir en la casa de la calle Albarellos
al 300 de Tigre, donde el 27 de mayo de 1996 asesinó de 113 puñaladas
a su novia Carolina Aló (17), en uno de los casos policiales más reso
nantes de la historia criminal argentina.
Esta posibilidad también fue rechazada y ahora se espera que el femi
cida ratifique un domicilio ante la justicia.
EL FEMICIDIO
Carolina estaba de novia con Tablado, quien por entonces tenía 20
años, e iban juntos a la nocturna de la Escuela Nº 1 Marcos Sastre
de Tigre.
Aquella noche, la pareja dio distintas excusas en el colegio, logró
salir antes del horario de salida y fue a la casa de Tablado, donde no
estaba su familia.
Luego de una discusión, Tablado persiguió a Carolina por varios am
bientes de la casa -escaleras, cocina y garaje- y la mató de 113 puñala
das aplicadas con cuatro armas blancas halladas en la escena: una
cuchilla de cocina, dos cuchillos de mesa Tramontina y un formón de
carpintería.
En 1998, Tablado fue condenado por la justicia de San Isidro a 24 años
de prisión por “homicidio simple” y evitó la prisión perpetua, y en
2013, sumó la segunda condena por amenazar a su exmujer -con
seis meses que debía agotarse a fines de 2022.
Por el beneficio de la derogada Ley del “2x1” y los cursos que hizo en
prisión como “estímulo educativo”, el cómputo de la condena se le re
dujo y la pena se le dio por concluida el 28 de febrero de 2020, cuando
abandonó la Unidad 21 de Campana y se fue a vivir a la misma casa
de Tigre donde cometió el femicidio, tras lo cual violó las perimetrales
que tenía con Edgardo Aló y de una impuesta hacia sus hijas mellizas
y volvió a ser detenido en una nueva causa por la que tuvo que purgar
un año de condena, hasta que el 15 de diciembre del año pasado recu
peró su libertad al salir de la Unidad 46 del Complejo Penitenciario San
Martín.