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lunes, 20 de junio de 2016

Maquillaron las licitaciones eléctricas para decir que se pagó menos que Cristina

Por Antonio RossiSegún especialistas del sector, se compararon precios 
de usinas que no son compatibles.
Al igual que aquellos comerciantes que utilizan “publicidad engañosa” para exaltar cualidades de un producto que no las tiene, la administración macrista “acomodó” los números y datos de la reciente adjudicación de generación eléctrica para mostrarse más “eficiente y cuidadosa” de los 
recursos públicos que el anterior gobierno kirchnerista.
Tal como solían hacer con frecuencia los
 encargados del “relato K”, los funciona
rios del área de Energía usaron la artima
ña de comparar cosas que no son equi
valentes para poner sobre el tapete la 
obtención de una supuesta mejora con
 respecto a la situación heredada.
Al dar a conocer los resultados de la lici
tación efectuada para ampliar la oferta de
 generación eléctrica con nuevas centrales térmicas de pequeño y media
no porte, el ministerio de Energía de Juan José Aranguren resaltó con
 bombos y platillos que “el precio promedio unitario de las usinas fue de
 21.833 U$S/MW-mes, un 32% inferior a los 32.000 U$S/MW-mes” que ha
bía arrojado la contratación de la anterior administración.
Según varios analistas del sector, este “logro económico” que se atribu
yó el gobierno no es tal porque la comparación de los precios está hecha
 con usinas que no tienen las mismas características técnicas, ni plazos
 de contratación de servicios similares.
El precio de 32.000 US$/MW-mes que los actuales funcionarios tomaron 
como referencia anterior para cotejar el valor promedio de la reciente lici
tación corresponde a los equipos generadores móviles que la gestión K. 
había contratado bajo el programa denominado UGEEM (Usinas de Gene
ración de Energía Eléctrica Móviles).
Estos generadores son los que se utilizaron para atender situaciones de 
emergencia y cubrir con urgencia casos críticos de falta suministro eléc
trico como los registrados el año pasado en Recoleta y Barrio Norte y en
 los últimos períodos estivales. En total, Enarsa llegó a tener contratados
 unos 357 equipos móviles alimentados con gasoil y biodiesel que aporta
ban una potencia disponible de 358 MW.
En cambio, lo que licitó en las últimas semanas el gobierno son centrales 
fijas similares a las que Enarsa venía contratando desde 2010 en el marco
 del programa de “Generación de Energía Eléctrica Distribuida”, más cono
cido en el ambiente como “Energía Delivery”.
Los valores de las “usinas delivery” que vienen de la gestión K. y que se
 deberían tomar como referencia para una objetiva comparación con los 
precios de la reciente licitación oscilan entre los 24.000 y 26.000
 US$/MW-mes, bastante menos que los 32.000 US$/MW-mes que utiliza
ron los funcionarios para exhibir una “marcada baja de los costos opera
tivos del sistema”.
Además, los que conocen a fondo los contratos señalan que hay otro da
to que desdibuja la comparación oficial y tiene que ver con el plazo de 
contratación.
Mientras los contratos de las usinas delivery K. se hicieron inicialmente 
por tres años, los nuevos convenios tienen una vigencia de 10 años.
Para incrementar la oferta eléctrica en el corto plazo, el gobierno diseñó 
un esquema muy particular que consiste en el alquiler de pequeñas y me
dianas usinas hasta 2027 y 2028 y el pago en dólares de la potencia y la 
energía suministradas mensualmente.
La licitación llevada adelante por la CAMMESA apuntó a reforzar el sumi
nistro en las zonas más críticas del país y a “satisfacer los requerimien
tos esenciales de la demanda durante el próximo verano 2017, el invier
no del 2017 y la temporada estival de 2018”.
En total, el gobierno terminó aceptando unas 20 ofertas por 1.917 MW 
que implicarán un desembolso para el Estado del orden de los 1.530 mi
llones de dólares.
Según el cronograma oficial, antes de febrero de 2017 se incorporarán 
al sistema 455 MW. Otros 327 MW ingresarán en julio del próximo año. Y
 en el verano de 2018, se sumará el último bloque de 1.134 MW.
Entre las empresas que salieron adjudicadas se encuentran Pampa Ener
gía –del dueño de Edenor y reciente comprador de los activos locales de
 Petrobras, Marcelo Mindlin--, la petrolera YPF, Genneia, el grupo Albane
si y los proveedores de equipos Sullair, Aggreko, APR Energy y Secco.
La gran excluida fue Central Puerto, la generadora controlada por SADE
SA que tiene entre sus principales dueños a Nicolás Caputo, el íntimo 
amigo y socio del presidente Mauricio Macri.
Había presentado una propuesta para montar un ciclo combinado de 
1.600 MW en la localidad bonaerense de Zárate. Los funcionarios encar
gados de evaluar las ofertas fundamentaron la exclusión en que no se 
encuadraba plenamente en los parámetros de la licitación y en el hecho 
de que la entrada en servicio prevista para 2019 excedía los 18 meses fi
jados como plazo máximo para el ingreso de la nueva generación al sis
tema eléctrico.

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