Las exigencias de Massa elevan al máximo la tensión en el armado de las listas seccionales

El tigrense pide un tercio de los lugares “a entrar” para la Legis
latura, y varios casilleros de los denominados “expectantes”. Si 
se los otorgan, y La Cámpora ocupa otros espacios los intenden
tes del PJ volverán a quedar relegados.

A 48 horas de cerrar las listas legislativas para las elecciones, el
 ensamble entre el PJ, el kirchnerismo y el Frente Renovador 
obliga a una quirúrgica intervención por parte de quienes tienen
 la lapicera en el Frente de Todos, con la necesidad de dejar en el
 camino la menor cantidad de heridos posibles. Pero eso será
 muy difícil si se cumplimentan las exigencias de Sergio Massa, 
que llegó con ocho puntos en las encuestas pero exige un tercio 
de los lugares a entrar en la Legislatura bonaerense.

Con una gran elección, incluso imponiéndose en una contienda
 electoral que se vislumbra pareja, difícilmente alguno de los 
frentes supere las 33 0 34 bancas nuevas entre la Cámara de 
Diputados y el Senado bonaerense. De esos lugares Sergio Massa
 pide 11, es decir un tercio. Además, exige otros cuatro o cinco
 casilleros de esos que se denominan en la zona gris, ese lugar
 de la lista que permite ingresas si se gana la sección o se consi
gue un resultado más amplio del esperado.
Con esta condición, quedan sólo dos tercios para que el kirchneris
mo acomode a los suyos, los intendentes del PJ tengan sus lugares
 y otros aliados (como los gremios) puedan colar alguna banca
 bonaerense. Por demás complicado un cierre donde los K, con 
Máximno Kirchner como uno de los dueños de la lapicera, están
 seguros de poder conservar un buen potencial en el Parlamento
 provincial.

“Así, el que pierde es de nuevo el PJ”, le dijo a este medio un diri
gente al tanto de las negociaciones, quien advirtió que “todavía no
 se expresa un enojo fuerte desde el partido, pero en este esquema
 van a quedar demasiados heridos”. Si eso sucede, el que podría 
verse beneficiado es Roberto Lavagna, única vía de escape posible
 en esta oportunidad. En las elecciones de 2015 y 2017 esa vía de
 escape fue precisamente el massismo.
Otro elemento de conflicto es el tema del cupo femenino. A todos 
los espacios le sobran hombres y pretenden ocupar los casilleros
 que le corresponden al sexo masculino, invitando a que sea otro
 el sector que “pague” las líneas que le corresponden al sexo
 femenino.  No es un hecho menor a la hora de contener a los 
dirigentes que quieren estar pero deben ceder el lugar por el cupo.

DIPUTADOS
Massa pide 3 lugares a entrar en la Primera sección electoral, 
donde está su potencial político. En la región norte del Conur
bano se eligen 15 diputados. En 2015, en una elección muy
 pareja se impuso el FpV, que coló 6 diputados, cambiemos
 metió 5 y el Frente Renovador 4. Aun cuando se pudiera pre
sumir que en la sección la suma del massismo potencie al 
Frente de Todos, lo máximo a lo que se podría aspirar es 8.
La Cuarta sección tiene 14 bancas en la Cámara baja, de las 
cuales el ganador de 2015 (Cambiemos) se llevó 6, el FpV 5 y
 el FR 3. Sergio Massa pide en la mesa de negociaciones del
 Frente de Todos 2 casilleros entre los primeros 6 o 7, que es
 la cifra a la que aspira el victorioso en una elección que se vis
lumbra polarizada, pero que tampoco le exige a la tercera fuerza
 un piso demasiado alto para llegar al reparto (con lo cual se
 quedaría con 2 bancas). En esa zona, el FR también aspira a 
poner la cabeza de lista y uno de los lugares “expectantes”.
También el massismo requiere dos lugares a entrar entre los 11
 legisladores que elige este año la Quinta sección. Tampoco es 
sencillo cumplir con ese requerimiento cuando el ganador de
 2015 (cambiemos) colocó 5, el FpV 4 y el FR 2.
En la Séptima hay sólo seis casilleros por llenar, y generalmente
 el reparto es 3 a 3 entre el primero y el segundo, o a lo sumo 4 a 
3.  De esos tres lugares casi seguros, el massismo pide uno.

SENADORES
En la Segunda se eligen 5 senadores, y el reparto generalmente
 es 3 a 2 en favor del ganador. El tigrense pretende que uno de 
los suyos vaya entre el primero y el segundo lugar. La exigencia
 aparece como algo exagerada ya que el Frente Renovador carece
 de una fuerte presencia en el región ubicada más al norte del 
territorio bonaerense.
También es una banca la que busca el nuevo socio en la Tercera 
sección, donde se espera el mayor caudal de votos para el Frente 
de Todos. Allí, el peronismo y el kirchnerismo son muy fuertes, y
 aunque pertenecen a esa región los dos únicos senadores que 
tiene el FR actualmente, el espacio carece de gran peso en el 
Conurbano sur. De los 9 senadores que se eligen, en 2015 el FpV
 colocó 4, Cambiemos 3 y el FR 2.Ahora Massa pide un lugar 
entre los cuatro primeros.
En la Sexta sección, se ponen en juego 6 senadores (en 2015 
fueron 4 de cambiemos y 2 del FpV), y el massimo quiere un
casillero entre los primeros 3. En la sección capital (Octava), en
ros casilleros.