Por Néstor Espósito
El Tribunal Oral que lleva adelante el juicio por la adjudicación de obra
pública en Santa Cruz entre 2003 y 2015 resolvió continuar con el alegato
acusatorio de la fiscalía, pese a las masivas recusaciones presentadas
contra uno de sus representantes, Diego Luciani, y el juez Rodrigo
Giménez Uriburu por jugar al fútbol en una residencia privada del ex pre
sidente Mauricio Macri.
Esta mañana, antes de que se iniciara la cuarta audiencia de alegatos,
el abogado Carlos Alberto Beraldi, quien defiende a la vicepresidenta,
Cristina Fernández de Kirchner, presentó un escrito de 20 páginas con
la recusación para ambos.
Cuando se inició la audiencia, al menos otros cinco imputados anuncia
ron que también recusarían al fiscal y al juez, a raíz de la publicación de
una serie de fotografías en el diario Página 12 en las que se los ve son
rientes formando parte de un equipo de fútbol en la quinta Los Abrojos,
propiedad de Macri.
Además de la vicepresidenta, también anunciaron la presentación de re
cusaciones las defensas de Lázaro Báez, Julio De Vido, Nelson Periotti,
Héctor Garro y Raúl Santibáñez.
No obstante, fuentes del resto de las defensas dejaron trascender que
el número de recusaciones podría ser aún mayor.
Los recusantes deberán presentar los fundamentos de sus pedidos de
apartamiento por escrito, en tanto que al menos el fiscal Luciani anun
ció que responderá a los planteos (“puedo hacerlo hoy mismo si quie
ren”, dijo aún sin conocer los fundamentos del resto) de manera oral.
Giménez Uriburu no anunció de qué manera responderá a los cuestiona
mientos y se exhibió en cambio con un mate con un escudo con los colo
res del equipo de fútbol que integra y que le valió la recusación presen
tada hoy.
El Tribunal resolvió tramitar las recusaciones por “vía incidental”, es de
cir, como una cuestión paralela que deben resolver los jueces que no
fueron recusados por el momento, mientras el juicio oral continúa con
su desarrollo.
De hecho, el fiscal Luciani inició su exposición de hoy embistiendo con
tra los contratos adjudicados a empresas de Báez para la “remediación
de canteras”, por las que –sostuvo- se pagaron más de 200 millones de
dólares por obras que consideró que no eran prioritarias.
Luciani, al igual que en todas las audiencias anteriores, repitió una y
otra vez que “Lázaro Báez era Néstor Kirchner y Cristina Fernández”,
y sobreactuó su “sorpresa” por lo que consideró una “matriz de corrup
ción”.
Tras una exposición inicial de Luciani, tomó la posta su colega Sergio
Mola, quien insistió con la falta de controles en los procesos licitato
rios para la adjudicación de obra pública para darle una pátina de lega
lidad a lo que definió como “una ficción”.
Los organismos que, según el fiscal coadyuvante, debían controlar
el proceso licitatorio, “seguían una orden superior que era direccio
nar la obra pública a las empresas de Lázaro Báez”, afirmó Mola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario