Lo dijo el diputado Recalde. Igual, aclaró que el camionero no será candidato este año. También afirmó que para él "sería un honor" ser compañero de fórmula de Cristina. Y volvió a pedir más lugares en las listas para los sindicatos.
Tal como se viene anunciando en cada acto, donde los mensajes no son pocos y sí para que muchos los interpreten, la CGT volvió a hablar y a pedir mayor presencia en cargos electivos para estas elecciones. Por tercera vez en un mes, el abogado cegetista y diputado nacional, Héctor Recalde, volvió a opinar sobre el rol del sector sindicalista de cara a octubre y se ocupó directamente de su jefe político, Hugo Moyano, y de sí mismo.
En una entrevista con la agencia de noticias DyN, Recalde sostuvo que el jefe de la CGT, Hugo Moyano, "está absolutamente capacitado para ser presidente" y dijo que "los dirigentes sindicales no son kelpers y esa discriminación de que no pueden ocupar cargos en el Poder Ejecutivo no honra a quienes lo plantean". Los flirteos entre la central obrera y el Gobierno no son como antes, y ahora los mensajes son más pedidos o reclamos que los piropos de otros años.
Pero Recalde no sólo habló de Moyano, sino que agregó a la novela sobre quién será el vice de la eventual candidatura de Cristina Kirchner un capítulo más. "Sería un honor que Cristina me pida que la acompañe", en una eventual fórmula, y enfatizó que "sería el mismo honor que si me llamase para ir a pintar paredes de los colegios con los chicos de La Cámpora o la Juventud Sindical", dijo Recalde, quien había hecho declaraciones similares al diario "El Tribuno" de Salta, y luego lo había desmentido.
Con respecto a las ambiciones propias de Moyano, aseguró que "sueña y quiere que un dirigente sindical ocupe esa alta magistratura pero lo importante y lo trascendente es que no fue una cuestión de personalismos y de ambición de cargo porque cuando hizo esa declaración claramente se había autoexcluido de las elecciones de este año".
Otro tema que preocupa al sindicalismo y al Gobierno por igual son la cantidad de cargos que obtendrá la central obrera. Sobre eso Recalde Sostuvo que "Es legítimo que el Movimiento Obrero aspire a aumentar su representación en el Congreso. Ahora somos trece e incluso hay agro diputados pero nadie se inquietó ni se preocupó por eso".
También aprovechó para criticar a la oposición, a la que ve, como muchos otros dirigentes, dispersa y sin un norte claro: "Los problemas de la oposición son tantos que me trasciende pero lo que pasó en realidad fue que en la oposición hubo una conjunción de fuerzas disímiles que se repartieron porciones de poder más allá de la ideología, la historia y las conductas incluso".
En una entrevista con la agencia de noticias DyN, Recalde sostuvo que el jefe de la CGT, Hugo Moyano, "está absolutamente capacitado para ser presidente" y dijo que "los dirigentes sindicales no son kelpers y esa discriminación de que no pueden ocupar cargos en el Poder Ejecutivo no honra a quienes lo plantean". Los flirteos entre la central obrera y el Gobierno no son como antes, y ahora los mensajes son más pedidos o reclamos que los piropos de otros años.
Pero Recalde no sólo habló de Moyano, sino que agregó a la novela sobre quién será el vice de la eventual candidatura de Cristina Kirchner un capítulo más. "Sería un honor que Cristina me pida que la acompañe", en una eventual fórmula, y enfatizó que "sería el mismo honor que si me llamase para ir a pintar paredes de los colegios con los chicos de La Cámpora o la Juventud Sindical", dijo Recalde, quien había hecho declaraciones similares al diario "El Tribuno" de Salta, y luego lo había desmentido.
Con respecto a las ambiciones propias de Moyano, aseguró que "sueña y quiere que un dirigente sindical ocupe esa alta magistratura pero lo importante y lo trascendente es que no fue una cuestión de personalismos y de ambición de cargo porque cuando hizo esa declaración claramente se había autoexcluido de las elecciones de este año".
Otro tema que preocupa al sindicalismo y al Gobierno por igual son la cantidad de cargos que obtendrá la central obrera. Sobre eso Recalde Sostuvo que "Es legítimo que el Movimiento Obrero aspire a aumentar su representación en el Congreso. Ahora somos trece e incluso hay agro diputados pero nadie se inquietó ni se preocupó por eso".
También aprovechó para criticar a la oposición, a la que ve, como muchos otros dirigentes, dispersa y sin un norte claro: "Los problemas de la oposición son tantos que me trasciende pero lo que pasó en realidad fue que en la oposición hubo una conjunción de fuerzas disímiles que se repartieron porciones de poder más allá de la ideología, la historia y las conductas incluso".
No hay comentarios:
Publicar un comentario