El Jefe de Gabinete en la mira de Cristina

Si bien hace dos semanas Scioli ya le habría comunicado a Cristina sus intenciones de ser candidato a presidente, siempre y cuando no se reforme la Constitución, la mandataria no está contenta con el Ejecutivo bonaerense. Las declaraciones del mandatario provincial no cayeron bien en la Casa Rosada. Y la manera que encontró CFK de canalizar su disgusto, no sería otra que apuntar a la cabeza del supuesto mentor de esos dichos: Alberto Pérez

Si bien hace dos semanas Scioli ya le habría comunicado a Cristina sus intenciones de ser candidato a presidente, siempre y cuando no se reforme la Constitución, la mandataria no está contenta con el Ejecutivo bonaerense. Las declaraciones del mandatario provincial no cayeron bien en la Casa Rosada. Y la manera que encontró de canalizar su disgusto, no sería otra que apuntar a la cabeza del supuesto mentor de esos dichos: Alberto Pérez. 

Desde las más altas esferas del gobierno nacional, observan con recelo las "buenas relaciones" que la Provincia mantiene con la Ciudad de Buenos Aires por el conflicto de los residuos sólidos urbanos; y destacan que las resoluciones siempre están en manos de los técnicos de la Jefatura de Gabinete. En Nación aseguran que Alberto Pérez es el responsable del cambio de actitud de Scioli, "el mal consejero", afirman.

Pero el tema no habría quedado solamente en una bronca no dada a conocer. Fuertes rumores indican que hace algunos días, un grupo de asesores de la mandataria se habría comunicado con el gobernador para "sugerirle" que se sacara de encima a Pérez; como alguna vez había sucedido con el ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal. En aquella oportunidad, el ex motonauta resistió contra viento y marea.

"Cristina no lo ve con buenos ojos a Alberto, está completamente segura de que es él quien hace que Scioli muestre un aspecto más duro y jugado. Salvo el recordado "Me rompe las pelotas tener que dar explicaciones", el bonaerense nunca dijo nada más que "trabajo", "esfuerzo", "turismo" y "deporte", dice un legislador muy allegado a los Kirchner, que no se anima a confirmar si existió o no el supuesto pedido de renuncia de Pérez que desde el kirchnerismo habrían solicitado a Scioli.

Hasta la previa del lanzamiento de La Juan Domingo estaba todo bien, ya que desde un primer momento se aclaró que la idea era bancar tanto a Scioli como a Cristina. Por otra parte, muchos de sus integrantes vienen del peronismo ortodoxo, tal es el caso de la voz cantante del grupo, el senador y ex ministro de Desarrollo, Baldomero Álvarez de Olivera. Sin embargo, enseguida empezó a hablarse solamente de Scioli, y a enfrentar cada vez con más frecuencia los dichos y actitudes de los K que juegan para Mariotto, dicho sea de paso, uno de los preferidos de CFK.

Como si fuera poco, Alberto Pérez aparece ahora como el principal referente de la agrupación D.O.S, que todavía no fue presentada de manera oficial. "El nombre lo dice bien claro, acá la única figura es Daniel Osvaldo Scioli", cuenta a La Tecla.info un allegado al gobierno bonaerense, quien al igual que otros tantos funcionarios de primera y segunda línea, será parte de la DOS. Acá no hay peronismo ortodoxo, esto es sciolismo puro. Detrás de Pérez, los dos referentes más fuertes serán los ministros de Producción, Cristian Breitenstein y de Desarrollo Social, Martín Ferré.

Los tiempos han cambiado. Antes Alberto Pérez era uno de los preferidos en Balcarce 50. Esa especie de "amor" se lo había ganado en 2009, con su fuerte defensa hacia las candidaturas testimoniales y con la salida de José Scioli de la Secretaría General. Vale recordar que Pepe se había mostrado disconforme con las respuestas obtenidas por los K ante su reclamo de mayor autonomía provincial. Por aquella época también se fue Santiago Montoya, titular de ARBA, luego de negarse a ser testimonial en las legislativas.

"A Pérez no lo quieren y le va a resultar difícil hacerlos cambiar de parecer", agrega alguien cercano a la Rosada, aunque no tan allegado como los que habrían pedido su cabeza. Scioli quiere ir por la presidencia en 2015 y como por ahora no se habla de reforma constitucional de manera seria, las chances están intactas. ¿Tiene el gobernador el camino allanado? Por el momento pareciera que no, su cambio de actitud lo estaría complicando más de la cuenta.