El kirchnerismo va a fondo con Scioli, y hasta le pusieron fecha

Ayer aumentó la presión del Gobierno nacional hacia el gobernador. Incluso trascendió una versión de que en el kirchnerismo aseguraron que lo obligarían a renunciar a su cargo en agosto Ayer aumentó la presión del Gobierno nacional hacia el gobernador. Incluso trascendió una versión de que en el kirchnerismo aseguraron que lo obligarían a renunciar a su cargo en agosto

Ni tregua, ni pacto de no agresión. El kirchnerismo volvió a dar muestras de que busca hacer realidad en la Provincia la frase que se le escuchó a la presidenta Cristina Fernández: “Ahora vamos por todo”. Así lo demuestran los últimos avances kirchneristas contra la gestión provincial de Daniel Scioli, a los que se suma un nuevo dato, la supuesta intención de obligar al gobernador a renunciar a su cargo. La ofensiva del Gobierno nacional, en los próximos días, también se daría en otro plano. Pasada la tormenta del  pago retrasado del medio aguinaldo, algunas mentes afiebradas de los K ahora apuntarían a intentar asfixiar económicamente a la Provincia, ajustando aún más el envío de fondos, para que tengan serias dificultades en los próximos meses. Y esto se producirá en un contexto donde hay gremios de estatales que ya comenzaron a movilizarse para pedir por un reclamo de aumento de haberes, producto de que la inflación licuó el aumento de poco más del 20% que se otorgó a principios de año. Esa intención se puso claramente de manifiesto ayer cuando se conocieron declaraciones del intendente radical de Pergamino, Héctor “Cachi” Gutierrez, que hizo público el contenido de una reunión secreta de legisladores provinciales de distintos partidos políticos, donde presuntamente el diputado ultrakirchnerista Fernando “Chino” Navarro habría blanqueado que la Casa Rosada le puso fecha de vencimiento al mandato de Scioli. Según los dichos de Gutiérrez, buscarían que renuncie en agosto. Eso no fue todo. La propia presidenta Cristina Kirchner, al intentar defender lo indefendible, como es el hecho de que se están sacando presos de la cárcel pata ir a actos de La Cámpora, embistió con dureza contra la política de seguridad y penitenciaria del gobierno provincial (ver página 4). El presunto interlocutor de Navarro fue el diputado provincial radical de Ramallo Roberto Filpo. Ayer, tanto Gutiérrez como Filpo apagaron sus celulares. Fuentes cercanas al legislador aseguraron a Hoy que Filpo “no ratifica” las declaraciones de Gutiérrez, pero tampoco las negaron. El que desmintió la conversación fue Navarro, aunque el diputado de Lomas de Zamora tiene antecedentes de doble discurso. Basta con comparar su actuales declaraciones en contra de las empresas que explotan el juego de azar en la Provincia y su complicidad para dejar pasar la renovación de las licencias cuando era presidente del bloque del Frente para la Victoria. Navarro incluso llegó a ocupar un despacho en la Gobernación bonaerense bajo la gestión de Scioli y  ahora es uno de sus principales detractores. La acusación que hizo el intendente de Pergamino, un exradical K de buena relación con el gobernador, no son las únicas versiones que atribuyen al kirchnerismo la intención de querer destituir al gobernador, quien, en ese caso de lograrlo, sería reemplazado por su vice Gabriel Mariotto, quien demostró ser opositor a Scioli y desde que asumió como titular del Senado buscó por varios métodos entorpecer su gestión. Varias fuentes legislativas coinciden en que los legisladores que responden a la agrupación kirchnerista La Cámpora, un grupo minoritario en la Legislatura, hacen alarde del amparo que tienen de la Presidenta y en varias ocasiones mencionan sus intenciones de querer “voltear” a Scioli.