ESCUCHANOS A TODO EL MUNDO

sábado, 7 de mayo de 2016

El gobierno justifica la polémica compra de gas a Chile: “Es por la falta de confianza en el país”

Por Antonio RossiLPO reveló que se pagó hasta un 128% más caro. Con
testan Balboa y Zuliani de Enarsa.
Tras las fuertes críticas al gobierno que surgieron después de que LPO divulgara en forma exclusiva la compra de gas a Chile con un precio más caro que el pagado a Bolivia y a los barcos metaneros, la conducción de
 la empresa estatal Enarsa salió a justificar la polémica importación y con
firmó que cerró otra adquisición directa con firmas trasandinas con el fin
 de reforzar el suministro interno de ese combustible entre los meses de 
mayo y agosto.
El presidente de Enarsa, Hugo Balboa y el director, José María Zuliani, re
cibierona  este medio en sus oficinas de la avenida Libertador y destaca
ron que “ésta era la única y más conveniente opción de abastecimiento 
de gas para el invierno” y se tuvo que aceptar las condiciones fijadas por
 los proveedores por “la falta de confianza en el país que tienen las empre
sas chilenas”.
Los funcionarios de la compañía estatal indicaron que no quedaba otra sali
da que traer gas desde Chile porque Bolivia no está en condiciones técni
cas de aumentar sus envíos (sobre un máximo programado de 19,9 millones 
de metros cúbicos diarios solo podrá despachar 16 MMCD a partir de junio)
 y las terminales regasificadoras de Bahía Blanca y Escobar no pueden reci
bir más barcos de los que ya están agendados para los próximos meses.
Balboa y Zuliani argumen
taron que se aceptó pagar
 a Chile por adelantado y 
por contratación directa 
hasta un 128 por ciento 
mas caro el gas porque 
en el país trasandino "no 
aceptan" las cartas de cré
dito del Banco Nación.
Según explicaron Balboa y Zuliani, la totalidad del gas que llegará desde Chile irá a parar a CAMMESA (la administradora estatal del mercado eléctrico) para que ésta lo distribuya a las centrales de generación térmica. “De esta manera, logramos remplazar una parte del gasoil importado más caro por el gas natural que es más económico”.
De acuerdo con el particular análisis de los directivos de Enarsa, CAMMESA tenía que importar durante el invierno 900.000 metros cúbicos de gasoil para las usinas térmicas a un precio promedio equivalente de US$ 10,4 por millón de BTU (MBTU). Por esta vía, el monto total que debía desembolsar trepaba a 319 millones de dólares.
Las compras directas acordadas con Chile permitirían sustituir unos 400.000
 metros cúbicos de ese gasoil, bajando la factura final de 319 millones a 272,6 millones de dólares, con un supuesto “ahorro de divisas” de 46,4 millones 
de dólares.
Tras indicar que a Bolivia se le está abonando un precio de 3,10 US$ por
 MBTU, los funcionarios reconocieron que el valor fijo pactado para el gas 
que comenzará a ingresar a Salta la próxima semana por el gasoducto No
randino es de 6,90 US$ por MBTU y que el monto total del contrato ascien
de a 22 millones de dólares.

El presidente de Enarsa, Hugo Balboa.

A su vez, confirmaron que tam
bién se firmó otro contrato de 
compra directa para importar 
276 millones de metros cúbicos 
por el gasoducto Gas Andes que
 une Chile con Argentina a la altu
ra de la provincia de Mendoza. 
En este caso, el precio está ata
do a una fórmula relacionada 
con la cotización del crudo tipo
 Brent y según los cálculos ofi
ciales se ubicará en un promedio
 de 7,2 US$ por MBTU. En total, 
el monto a pagar por este nuevo
 contrato trepará a 73, 4 millones
 de dólares.
Con respecto al convenio cerrado
 con Solgas – la intermediaria del
 grupo internacional GDF Suez—
por la provisión de gas a Salta, 
Balboa y Zuliani admitieron que 
tuvieron que pagar por anticipa
do la totalidad de la compra “por
que las empresas chilenas, por 
la falta de confianza que les ge
nera Argentina, no quieren acep
tar como garantía cartas de crédito del Banco Nación”.
Otra imposición que tuvieron que convalidar de Solgas fue la cesión de la
 soberanía judicial para que se aplique la ley del estado de Nueva York pa
ra la resolución de conflictos.
“Si no aceptábamos ese clausula, no podíamos firmar el contrato de com
pra”, precisó Zuliani.
En tanto, en el otro contrato suscripto con la empresa chilena ENAP lo que
 se acordó fue que se utilizarán las normas de la “Convención de Viena” y
 que cualquier arbitraje tendrá como sede Buenos Aires.
Con respecto al cerrojo impuesto por la cláusula contractual de “estricta confidencialidad y reserva”, los ejecutivos de Enarsa buscaron desligarse
 de cualquier semejanza con el conflictivo caso de YPF-Chevron.
“La confidencialidad –señalaron --recae sobre las cuestiones económicas
 porque la parte vendedora no quiere que otra competidora conozca los de
talles del acuerdo”.
Más allá de los argumentos oficiales, lo que sí queda claro es que si no 
fuera por la publicación de los términos del contrato que hizo LPO, los fun
cionarios difícilmente hubieran dado a conocer públicamente los valores
 y las condiciones de las compras directas de gas que se acordaron con
 las compañías trasandinas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario