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jueves, 3 de mayo de 2018

La corrida del dólar no se frena: llegó a $23,30 pese a que Sturzenegger volvió a subir la tasa

LPOSaltó $1,80. El BCRA intervino con USD 250 millones y subió 
300 puntos la tasa, pero no logró frenar la suba.
La corrida del dólar no encuentra freno y la cotización batió este 
jueves un nuevo récord, al quebrar la barrera de los $23 en las 
primeras dos horas de la jornada cambiaria, lo que obligó al BCRA 
a aplicar una nueva suba de la tasa de interés.
Casi de inmediato en la pizarra del Banco Nación -que hoy lideró la 
remarcación de la cotización- se vio el impacto, que pasó de $22,50 
a $23,30 para la venta, nuevo récord histórico.A escasos minutos del 
cierre del Mercado Único Libre de Cambios (MULC), la divisa cotizaba
 a $22,20 en el mercado mayorista prácticamente sin intervención 
del Banco Central y a último minuto dio un salto a $23.
Con este nivel, el peso argentino acumula una depreciación del 23,15% 
en lo que va del año al pasar de 18,92 el último día de diciembre hasta
 los actuales $23,30 de hoy. Se trata así de la moneda que más valor
 perdió frente al dólar en todo el mundo.
Toda la jornada estuvo marcada por la elevado volatilidad del dólar y 
las tasas. Luego de que el dólar llegara a $21,45 en el segmento mayo
rista a menos de una hora de la apertura del mercado, el Banco
 Central  desembolsó 250 millones de dólares para contener la suba 
en $21,50, aunque nuevamente sin éxito.
A partir de ese entonces, el Banco Central se retiró del MULC y, a di
ferencia de lo que sucedió en las jornadas previas, no volvió a inter
venir en el resto de la jornada. Esta ausencia marcó una novedad en 
la forma de Sturzenegger de navegar el shock: dejar que la divisa se 
dispare sin sacrificar más dólares. En los últimos diez días, había de
sembolsado el 7,5% de las Reservas Internacionales.


El informe que difunde el Banco Central tras la primera hora de opera
ciones marcaba una cotización promedio del tipo de cambio minorista
 para la venta era de $21,80, 28 centavos por encima del cierre del miér
coles. Ya a esa hora, varios privados lo vendían a $21,90.
Mientras tanto, la tasa de interés en el mercado secundario de Letras 
del Banco Central (Lebacs) era cada vez mayor. El mercado antes del
 mediodía había corrido la tasa de la Letra con vencimiento en mayo 
al 35,25%.
Ante esto, la entidad que preside Federico Sturzenegger se vio obliga
da a subir nuevamente la tasa de interés de referencia como había
 hecho la semana pasada. Tras una reunión de imprevisto del Comité
 de Política Monetaria, sobre el mediodía la autoridad monetaria resol
vió una segunda suba de 300 puntos básicos para llevar la tasa de 
Política Monetaria al 33,25%.
Esto hizo que por unos minutos volviera la calma a los mercados y
 que la divisa retrocediera en 10 centavos tanto en el segmento mayo
rista como en el minorista. A su vez, en el mercado secundario la tasa
 de Lebac rozaba el 38% en su plazo más corto (13 días), valor que no
 se registraba desde 2016.
En un comunicado, el BCRA indicó que la decisión se tomó "ante la
 dinámica adquirida por el mercado cambiario" y "con el objetivo de 
garantizar el proceso de desinflación y está listo para actuar nuevamen
te si resultara necesario". Además, ratificó la idea de cumplir la meta 
de inflación del 15%.
Sin embargo, esta calma fue transitoria y a una hora del cierre el dólar 
había retomado el sendero alcista y se hallaba en $22,50 en el tramo 
minorista vendedor y $22,20 en el mayorista. Minutos antes del cierre,
 la última operación convalidó el alza a $23 en el MULC y  la corrida 
del precio fue inmediata en el segmento minorista: en el Banco Nación
 la moneda estadounidense cerró a $23,30 y en los bancos privados 
se vendía a $23,50.
Ayer, el Central resignó casi 505 millones de dólares para contener la 
disparada del dólar, que en el segmento minorista saltó más de 60 cent
avos. La semana pasada, el BCRA ya había sacrificado reservas por
 casi 4.400 millones de dólares.
Pese a la incertidumbre, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró que
 la disparada del dólar "no nos tiene que asustar" porque "es conse
cuencia de vivir integrados en un mundo que tiene volatilidades". "Mu
chas monedas de la región y del mundo han tenido movimientos en los
 últimos días", argumentó.
"Si no tuviéramos la flotación o no hubiera correcciones, tendríamos 
atraso cambiario, que afectaría al empleo y la producción", consideró
 Peña. "Lo importante es entender que cuando hay corrimientos (del 
tipo de cambio) también tienen que ver con situaciones internacionales"
, agregó.

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