La Casa Rosada informó esta noche que la presidenta Cristina Kirchner sufrió ayer una arritmía de corazón, pero lo más grave es un coágulo en la cabeza y deberá hacer reposo por un mes. Hicieron venir de urgencia de Brasil a Amado Boudou y asumiría la Presidencia.
La presidenta Cristina Kirchner deberá hacer un mes de reposo por estricta recomendación de los médicos que la atendieron luego que sufriera un arritmía y al hacerle estudios se descubriera que tenía un coágulo en la cabeza, que según fuentes consultadas por LPO, tuvo la gravedad suficiente como para recomendarle reposo. El lapso de un mes se habría decidido en consultas con el Gobierno.
Las fuentes informaron a LPO que en este momento se discute en la cúpula del kirchnerismo que camino institucional tomar y el Gobierno está conducido en los hechos por el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini. Por las dudas, le ordenaron al vicepresidente que regrese de inmediato de Brasil, país en el que estaba haciendo escala como parte de su viaje a Cannes, Francia, para asistir a un encuentro de series de televisión, junto a la presidenta del Instituto del Cine y candidata a diputada, Liliana Mazure.
Se analiza si es posible cederle el poder de manera "limitada" hasta que Cristina se recupere. Otra opción que se evalúa es ver si existe la posibilidad de que cumpla el reposo sin pedirse licencia.
En la Casa Rosada son muy concientes que el vicepresidente es resistido por sectores de la oposición y la evalución de como sería un interinato a su cargo ya está en la mesa de discusión.
Según la información a la que accedió LPO, el problema de la arritmia no es el que preocupa a los médicos. Sino que a raíz de los controles realizados se descubrió que tenía un viejo coágulo en la cabeza, que es preocupante. La versión oficial es que es producto de un golpe que se produjo el 12 de agosto, un día después de las primarias. El 13 la Presidenta reapareció en público con un discurso incendiario en Tecnópolis.
Los médicos evalúan si este coágulo se reabsorverá naturalmente o habrá que tomar algún tipo de medida más activa para disolverlo. De allí la recomendación del prolongado coágulo. En principio, la información a la que accedió LPO, es que se trata de un coágulo "superficial" y no sería necesaria una intervención.
La información fue confirmada esta noche por el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro. En un comunicado leído en Casa de Gobierno, Scoccimarro informó que "la Presidenta se realizó un estudio cardiovascular en la Fundación Favaloro y debido a que presentó un cuadro de cefalea, se realizaron estudios neurológicos con un diagnóstico de colección subdural crónica y se le indicó reposo de un mes".
Se explicó que ante la cefalea "se solicitó su evaluación neurológica al Instituto de Neurociencias de la mencionada fundación, a cargo del Dr. Facundo Manes".
El comunicado lleva la firma de los médicos de la Unidad Presidencial Luis Buonomo y Marcelo Ballesteros -en su momento cuestionados por el falso diagnóstico de cáncer-, quienes parecen cubrirse de eventuales críticas al explicar que si bien es verdad que la Presidenta sufrió un fuerte golpe en la cabeza el 12 de agosto, en ese momento "se le realizó una tomografía computada de cerebro en el sanatorio Otamendi, resultando la misma normal".
"Posteriormente, la Sra. Presidenta no presentó síntomas", agregan los médicos en el comunicado y explican que una vez detectado el coágulo se resolvió indicarle un mes de reposo "junto a seguimiento evolutivo estricto clínico e imagenológico".
El comunicado se conoció esta noche, luego que trascendiera al mediodía a través de un cable de la agencia NA, que la Presidenta había sido internada en el hopsital de la Fundación Favaloro y durante toda la jornada la Casa Rosada no informara cual era la situación de la salud presidencial.
La información que había trascendido inicialmente era que la Presidenta se había sometido a una ecografía doppler, supuetamente vinculado a la intervención quirúrgica a la que fue sometida en enero de 2012 en la que se le extirpó la tiroides.
Las fuentes informaron a LPO que en este momento se discute en la cúpula del kirchnerismo que camino institucional tomar y el Gobierno está conducido en los hechos por el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini. Por las dudas, le ordenaron al vicepresidente que regrese de inmediato de Brasil, país en el que estaba haciendo escala como parte de su viaje a Cannes, Francia, para asistir a un encuentro de series de televisión, junto a la presidenta del Instituto del Cine y candidata a diputada, Liliana Mazure.
Se analiza si es posible cederle el poder de manera "limitada" hasta que Cristina se recupere. Otra opción que se evalúa es ver si existe la posibilidad de que cumpla el reposo sin pedirse licencia.
En la Casa Rosada son muy concientes que el vicepresidente es resistido por sectores de la oposición y la evalución de como sería un interinato a su cargo ya está en la mesa de discusión.
Según la información a la que accedió LPO, el problema de la arritmia no es el que preocupa a los médicos. Sino que a raíz de los controles realizados se descubrió que tenía un viejo coágulo en la cabeza, que es preocupante. La versión oficial es que es producto de un golpe que se produjo el 12 de agosto, un día después de las primarias. El 13 la Presidenta reapareció en público con un discurso incendiario en Tecnópolis.
Los médicos evalúan si este coágulo se reabsorverá naturalmente o habrá que tomar algún tipo de medida más activa para disolverlo. De allí la recomendación del prolongado coágulo. En principio, la información a la que accedió LPO, es que se trata de un coágulo "superficial" y no sería necesaria una intervención.
La información fue confirmada esta noche por el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro. En un comunicado leído en Casa de Gobierno, Scoccimarro informó que "la Presidenta se realizó un estudio cardiovascular en la Fundación Favaloro y debido a que presentó un cuadro de cefalea, se realizaron estudios neurológicos con un diagnóstico de colección subdural crónica y se le indicó reposo de un mes".
Se explicó que ante la cefalea "se solicitó su evaluación neurológica al Instituto de Neurociencias de la mencionada fundación, a cargo del Dr. Facundo Manes".
El comunicado lleva la firma de los médicos de la Unidad Presidencial Luis Buonomo y Marcelo Ballesteros -en su momento cuestionados por el falso diagnóstico de cáncer-, quienes parecen cubrirse de eventuales críticas al explicar que si bien es verdad que la Presidenta sufrió un fuerte golpe en la cabeza el 12 de agosto, en ese momento "se le realizó una tomografía computada de cerebro en el sanatorio Otamendi, resultando la misma normal".
"Posteriormente, la Sra. Presidenta no presentó síntomas", agregan los médicos en el comunicado y explican que una vez detectado el coágulo se resolvió indicarle un mes de reposo "junto a seguimiento evolutivo estricto clínico e imagenológico".
El comunicado se conoció esta noche, luego que trascendiera al mediodía a través de un cable de la agencia NA, que la Presidenta había sido internada en el hopsital de la Fundación Favaloro y durante toda la jornada la Casa Rosada no informara cual era la situación de la salud presidencial.
La información que había trascendido inicialmente era que la Presidenta se había sometido a una ecografía doppler, supuetamente vinculado a la intervención quirúrgica a la que fue sometida en enero de 2012 en la que se le extirpó la tiroides.
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