CFK habría apuntado contra los sectores más conservadores del peronismo provincial. Por ello, bajó línea directa a sus hombres que pisarán el recinto para que vayan contra dicho sector. Mariotto y La Cámpora, los soldados de primera línea
La Presidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, decidió poner punto final a su relación con la “corporación” del justicialismo en territorio bonaerense. “Conmigo o contra mi” es el nuevo lema que habría bajado desde Casa Rosada.
Por eso, dio claras instrucciones a su nueva tropa en territorio sciolista para que vaya contra los sectores más tradicionales del PJ. Esta decisión atenta contra los intereses de Daniel Scioli y su capacidad de mando, ya que la intención del mandatario era agrupar a todos los sectores del partido bajo su ala.
De hecho, el sector al que apunta Cristina, le había sido esquivo durante los ocho años del kirchnerismo, cuestión que no había ocurrido con el primer mandatario provincial, quien tenía muy buena relación.
La intención de CFK es el de tomar la manija de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires y manejarla desde la Rosada. Esto va en contra de las aspiraciones de muchos intendentes y, por sobre todo, de Daniel Scioli.
En los años que lleva el Frente para la Victoria al mando del poder nacional, nunca pudo dominar los recintos de la Provincia, ya que el peronismo histórico delineaba sus propias estrategias políticas.
El peso de La Cámpora en las listas, con muchos lugares asegurdados desde el 10 de diciembre, favorece a la intención de la Casa Rosada de “tomar el toro por las astas”.
Por lo bajo se escucha a los jóvenes K sostener que la bajada de línea fue muy clara: "ir a la Legislatura a romper con la corporación del PJ bonaerense" colocando a Mariotto al frente del ataque.
Por eso, dio claras instrucciones a su nueva tropa en territorio sciolista para que vaya contra los sectores más tradicionales del PJ. Esta decisión atenta contra los intereses de Daniel Scioli y su capacidad de mando, ya que la intención del mandatario era agrupar a todos los sectores del partido bajo su ala.
De hecho, el sector al que apunta Cristina, le había sido esquivo durante los ocho años del kirchnerismo, cuestión que no había ocurrido con el primer mandatario provincial, quien tenía muy buena relación.
La intención de CFK es el de tomar la manija de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires y manejarla desde la Rosada. Esto va en contra de las aspiraciones de muchos intendentes y, por sobre todo, de Daniel Scioli.
En los años que lleva el Frente para la Victoria al mando del poder nacional, nunca pudo dominar los recintos de la Provincia, ya que el peronismo histórico delineaba sus propias estrategias políticas.
El peso de La Cámpora en las listas, con muchos lugares asegurdados desde el 10 de diciembre, favorece a la intención de la Casa Rosada de “tomar el toro por las astas”.
Por lo bajo se escucha a los jóvenes K sostener que la bajada de línea fue muy clara: "ir a la Legislatura a romper con la corporación del PJ bonaerense" colocando a Mariotto al frente del ataque.
No hay comentarios:
Publicar un comentario