"La nota me cayó como un balde de agua fría, yo no tengo ningún negocio con Schoklender. En cuanto a mis hijos es verdad que trabajaron en la Fundación Madres de Plaza de Mayo", señaló el intendente de Pinamar, contestando de esta manera a la publicación realizada con Clarín. Dijo que en el distrito "no hay obras" de Sueños Compartidos
"La nota me cayó como un balde de agua fría, yo no tengo ningún negocio con Schoklender. En cuanto a mis hijos es verdad que trabajaron en la Fundación Madres de Plaza de Mayo. Después que a mi destituyen tuvimos una crisis familiar muy importante, que incluyó el aspecto económico y ellos entraron a trabajar ahí", señaló Roberto Porretti, al ser consultado por la nota publicada por el diario Clarín.
En la misma se da cuenta que "las inversiones inmobiliarias de Pablo Schoklender lo llevaron hasta las playas de Pinamar, donde supo ganar la confianza del ex intendente de esa ciudad, Roberto Porretti, destituido en 2008, casualmente, tras un escándalo de corrupción. Los contactos se extendieron al resto de la familia. Los tres hijos del ex jefe comunal, Nahime, Martín y Camilo, fueron empleados de la Fundación hasta que estalló el escándalo".
"Martín, mi hijo mayor, es abogado y por ayudarme a mi con el tema de la dfestitución, perdió su empleo. Lo mismo le sucedió al menor. En cuanto a Martín trabajó un tiempo en la Fundación y después renunció porque no se sentía reconocido en su prtofesión y no estaba conforme con el sueldo. Estio fue antes de todo este tema", agregó el ex mandamás pinamarense, a modo de defensa.
Y continuó explicando que "mi hijo menor, Camilo, trabajaba en un restaurante, limpiaba el piso, acarreaba cajones de verdura y estaba en la cocina. El también renunció antes de todo este tema porque tampoco le alcanzaba el dinero y se buscó un trabajo mejor. Lo propio hizo mi hija Naymé".
Por último, indicó que "estoy agradecido a la Fundación porque en un momento me ayudó, a partir del trabajo que le dio a mis hijos, a resolver un inconveniente económico, ya que en la familia no se generaban recursos", señaló el edil y aclaró que "acá no se hizo ninguna obra", aunque destacó que "ya no siendo intendente yo, creo que se realizaron gestiones con la Fundación, pero que finalmente no se llevó a cabo".
La publicación agrega que "el vínculo entre Pablo y Porretti (padre) se trasladó en un apoyo explícito en las campañas políticas de Pinamar . En esa ciudad, aseguran que en los tiempos que intentaba volver al poder, el ex intendente se sacaba fotos con camiones de materiales de la Fundación. El dato surge justo esta semana, donde Sergio Schoklender denunció que la Fundación era una
caja que servía para sostener campañas políticas como la de Amado Boudou y Abel Fatala. Igualmente, la documentación que presentó no alcanzaría como prueba".
En la misma se da cuenta que "las inversiones inmobiliarias de Pablo Schoklender lo llevaron hasta las playas de Pinamar, donde supo ganar la confianza del ex intendente de esa ciudad, Roberto Porretti, destituido en 2008, casualmente, tras un escándalo de corrupción. Los contactos se extendieron al resto de la familia. Los tres hijos del ex jefe comunal, Nahime, Martín y Camilo, fueron empleados de la Fundación hasta que estalló el escándalo".
"Martín, mi hijo mayor, es abogado y por ayudarme a mi con el tema de la dfestitución, perdió su empleo. Lo mismo le sucedió al menor. En cuanto a Martín trabajó un tiempo en la Fundación y después renunció porque no se sentía reconocido en su prtofesión y no estaba conforme con el sueldo. Estio fue antes de todo este tema", agregó el ex mandamás pinamarense, a modo de defensa.
Y continuó explicando que "mi hijo menor, Camilo, trabajaba en un restaurante, limpiaba el piso, acarreaba cajones de verdura y estaba en la cocina. El también renunció antes de todo este tema porque tampoco le alcanzaba el dinero y se buscó un trabajo mejor. Lo propio hizo mi hija Naymé".
Por último, indicó que "estoy agradecido a la Fundación porque en un momento me ayudó, a partir del trabajo que le dio a mis hijos, a resolver un inconveniente económico, ya que en la familia no se generaban recursos", señaló el edil y aclaró que "acá no se hizo ninguna obra", aunque destacó que "ya no siendo intendente yo, creo que se realizaron gestiones con la Fundación, pero que finalmente no se llevó a cabo".
La publicación agrega que "el vínculo entre Pablo y Porretti (padre) se trasladó en un apoyo explícito en las campañas políticas de Pinamar . En esa ciudad, aseguran que en los tiempos que intentaba volver al poder, el ex intendente se sacaba fotos con camiones de materiales de la Fundación. El dato surge justo esta semana, donde Sergio Schoklender denunció que la Fundación era una
caja que servía para sostener campañas políticas como la de Amado Boudou y Abel Fatala. Igualmente, la documentación que presentó no alcanzaría como prueba".
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