Etchevarren criticó a un medio y la respuesta fue contundente
Tal vez preocupado y nervioso por la posible derrota, el mandamás municipal de Dolores, Camilo Etchevarren criticó con dureza a uno de los medios periodísticos más importantes de la ciudad, Compromiso de Dolores, y especialmente a su director Pedro Sabalette, quien no tardó en reaccionar y le cantó las cuarenta al referente de Lilita Carrió
l intendente de Dolores, Camilo Echevarren, no tuvo una buena elección primaria y todo indica que el venidero domingo claudicará ante el kirchnerista Facundo Celasco, que viene de mostrarse, dando de esta manera señles de unidad, junto a quien resultara derrotada en la interna del FpV, Adriana Meckievi.
Tal vez preocupado y nervioso por la posible derrota, el mandamás municipal criticó con dureza a uno de los medios periodísticos más importantes de la ciudad, Compromiso de Dolores, y especialmente a su director Pedro Sabalette, quien no tardó en reaccionar y le cantó las cuarenta al referente de Lilita Carrió.
"El viernes pasado Camilo Etchevarren en el habitual espacio que le brinda una radio local, dedicó parte de su tiempo para hablar del Diario COMPROMISO, de mi persona como director y de otra serie de cuestiones, que lo llevaron a decir entre otros cosas que éramos paranoicos, en mi caso una mala persona que arrastraba a otros con mis designios, y que nuestra conducta o proceder había provocado daños en personas o familias", señaló Sabalette.
Agregó que "Si haber dicho y demostrado a través del Diario que Camilo Etchevarren viajó al Brasil, sin haber pedido autorización al Consejo Deliberante como marca la ley, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si haber dicho que en durante esas ausencias hay Decretos municipales que aparecen firmados por el Intendente Etchevarren, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
Y continuó: "Si haber publicado por estos hechos que había sido denunciado penalmente, y que la Fiscal García Cuerva lo había imputado por abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si ante una operación de prensa montada por el abogado del Intendente y los medios de prensa pagos por éste, tratando de desmentir que estaba imputado de esos delitos y que el Diario mentía, debimos publicar en tapa la copia de la notificación personal que se le había efectuado a Etchevarren, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
Si haber dicho y demostrado, que el supuesto interés o preocupación de Etchevarren por la venta de droga en Dolores era sólo una campaña, ya que nada dijo ante la justicia cuando lo llamaron a declarar, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si haber dicho y demostrado en base de las consultas de las causas penales obrantes en la Justicia Departamental, que no era cierto que Etchevarren y su comisario preferido metían presos a diez delincuentes por día, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
"Si haber publicado que los tres pedidos de juicio político contra el Fiscal Escoda, habían sido impulsados por Etchevarren con el solo objetivo de que el mismo no fuera nombrado como Fiscal General. Que los mimos fueron redactados con idénticos términos, patrocinados por su hermana como abogada, certificadas las firmas el mismo día y por el mismo escribano, etc., es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
"Si haber publicado que el Dr. Escoda en un escrito refiere de un procedimiento por drogas en un auto oficial, y del intento que habría hecho el jefe comunal ante ese funcionario para parar una investigación, es ser paranoico. Sí, soy un paranoico. Si debo reconocer y me debo reconocer como paranoico, por haberme manejado con información veraz, con copia de todo lo publicado y por hacer que la comunidad supiera lo que muchos sabían pero callaban o ocultaban".
"Si reitero, acepto que me puedan tildar de paranoico, lo que no acepto es que me traten de mentiroso, una condición sobre la que quizás Etchevarren se podría explayar con más autoridad, porque si algo que es cierto y comprobable, es que su gestión como intendente no resiste un archivo.
En cuanto a que soy una mala persona y que arrastro con mi proceder a otros, quizás tenga Etchevarren razón, y por eso me pareció importante para ello recordarle a nuestro mandamás:
Que si bien no hice campaña ni aporté dinero para que fuera Intendente, en el año 2005 siendo Etchevarren concejal hice un Proyecto que se denominó "Plan Solidario Municipal", a través del cual con parte de la dieta de los concejales se buscaba paliar en medio de la crisis la situación que vivían muchos dolorenses desocupados. Ese proyecto Etchevarren lo presentó como propio, pero yo conservo el original por si desea lo puedo publicar.
Que también siendo él concejal me pidió que lo ayudara a modificar la Ordenanza del Plan Toros, para poder presentarla en el Concejo como propia, ordenanza que era de mi autoría y presentado en 1987 (tengo el original si desea que lo publique). Que en 2007 y en plena campaña, una familiar directa suya trajo a este Diario una publicación que afectaba enormemente su candidatura, ante lo cual le avisé para que hablara con la misma y la retirara, lo que esta persona hizo (hay fotocopia).
Que electo intendente y durante muchas jornadas en casa de mi hijo, le aporté a Etchevarren y a su segundo Arrabit, toda mi experiencia como concejal y en su momento como intendente interino, para que organizara su gobierno, ya que no tenían idea de cómo iniciarlo y menos encaminarlo.
Y tanta fue mi ayuda porque ni Camilo Etchevarren ni su elenco sabían, que para crear la Jefatura de Gabinete yo elaboré el texto completo del decreto de su creación, el que luego mandó Etchevarren al Concejo Deliberante para ser ratificado (conservo el original por si tengo que publicarlo).
O cuando decidió presentarle un proyecto al gobernador Scioli proponiendo que los jueces fueran elegidos por el pueblo y me pidió que se lo redactara, porque nadie de los suyos sabía o quería hacerlo (si desea puedo publicar el original).
O para aquel 9 de Julio de 2009, cuando me llamó y me pidió que le redactara un saludo a la comunidad, el que llevó el título “Debemos recuperar aquella Patria grande” (si desea puedo publicar el original).
Quizás también deba recordarle también, cuando en marzo de 2008 y en la oficina que ocupaba el Dr. Arrabit me dijo que su recién iniciada administración tenía dos enemigos, su hermano y la Concejal Llona. El primero porque quería poner a un abogado amigo en el cargo de Jefe de Gabinete, y la segunda porque también pretendía serlo. Si lo ha olvidado, le recuerdo que le dije que tuviera precaución, que no apresurara decisiones, porque a ambas personas las necesitaba.
Habría otras muchas cosas más para recordar o contar, pero no lo creo conveniente en este momento. Lo que traigo hoy a colación no es para que Etchevarren me lo agradezca, sino para que busque cómo encuadrarlo en el mal hombre que dice que soy.
Pero y si en verdad lo soy, cabría preguntarme con respecto a Etchevarren cuando fue el momento en que comencé a ser “el malo”.
Y quizás ello ocurrió cuando le dije que no a su pedido para encabezar una lista, que apoyada por sus comerciantes amigos buscaría desplazar a Ezequiel Lauría de la presidencia de la Cámara de Comercio.
O cuando le avisé en febrero de 2009 que había un pedido para remover a los Comisarios Romero y Puig, por las extrañas circunstancias que rodeaban dos robos ocurridos en nuestra ciudad, uno en una joyería de la calle Mitre, desvalijada a pleno día y que debió cerrar definitivamente sus puertas, y el de los televisores de Casa Sampietro, cuando la policía tardó diez minutos para llegar al local desde la Comisaría, ubicada a cuatro cuadras del lugar, tras haber sido alertada. O cuando en julio de 2009 publiqué los allanamientos a la Comisaría y que se investigaba, quizás sin querer, rozando algún interés particular que no pude por entonces imaginar.
En cuanto al daño que según Etchevarren hice o hicimos desde el diario a personas, seguramente refiriéndose a los comisarios y sus familias. Y como parece que el intendente sufre de mala memoria o no tiene en su casa un espejo donde mirarse, debo recordarle o refrescarle algunos casos en particular que si no han sido conductas dañosas para con personas, no sé como calificarlo.
Como los empleados por él desplazados a funciones casi degradantes por no comulgar con su gestión. Un Arquitecto que actualmente es sereno; una Contadora Pública trasladada de Contaduría a la Biblioteca, o la secretaria de un bloque enviada por usted a trabajar a Hidráulica provincial. A aquellos muchos empleados que sin función específica o tareas designadas, se acumulan en una dependencia de deportes quizás, intentando con ello que renuncien. O la persecución puntual que hace a una persona bajo atención psiquiátrica. O el desalojo compulsivo de una moradora de una céntrica vivienda que recientemente intentó.
Recordarle la denuncia penal que hizo contra empleados municipales por daño, acusándolos de haber roto un cenicero en una movilización en su contra.
O los ascensos que anuló de dos personas promovidas por la anterior gestión, decisión que la justicia luego revocó.
El caso de los funcionarios judiciales y policiales que públicamente atacó durante más de año y medio, por su mentado interés en combatir la droga, quienes sufrieron igual o más que los que Etchevarren defiende.
O el caso del menor que realizaba tareas en un barrio de viviendas de la Municipalidad y sufriera quemaduras, y que más que ayuda recibió aprietes.
O el de la familia a la que se le quemó la humilde casilla y por haber reclamado ayuda a través del Diario, se pretendió con aprietes y promesas que cambiaran lo dicho.
Sería quizás un largo racconto de hechos o situaciones no gratificantes que también pueden calificarse como daño a personas, vividas todas a lo largo de la gestión Etchevarren y provocadas por la misma. Quizás podría seguir hablando de otros casos ayudado por archivo personal o del Diario, pero ello por lo extenso sería seguramente tedioso para nuestros lectores.
Y para terminar esta nota-respuesta, sólo me queda por decir que en algo coincido con Luis María Camilo Etchevarren, y es en que después de las elecciones se debe hablar, porque yo también tengo aún algo más para decir y no quisiera tomarlo por sorpresa".
Tal vez preocupado y nervioso por la posible derrota, el mandamás municipal criticó con dureza a uno de los medios periodísticos más importantes de la ciudad, Compromiso de Dolores, y especialmente a su director Pedro Sabalette, quien no tardó en reaccionar y le cantó las cuarenta al referente de Lilita Carrió.
"El viernes pasado Camilo Etchevarren en el habitual espacio que le brinda una radio local, dedicó parte de su tiempo para hablar del Diario COMPROMISO, de mi persona como director y de otra serie de cuestiones, que lo llevaron a decir entre otros cosas que éramos paranoicos, en mi caso una mala persona que arrastraba a otros con mis designios, y que nuestra conducta o proceder había provocado daños en personas o familias", señaló Sabalette.
Agregó que "Si haber dicho y demostrado a través del Diario que Camilo Etchevarren viajó al Brasil, sin haber pedido autorización al Consejo Deliberante como marca la ley, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si haber dicho que en durante esas ausencias hay Decretos municipales que aparecen firmados por el Intendente Etchevarren, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
Y continuó: "Si haber publicado por estos hechos que había sido denunciado penalmente, y que la Fiscal García Cuerva lo había imputado por abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si ante una operación de prensa montada por el abogado del Intendente y los medios de prensa pagos por éste, tratando de desmentir que estaba imputado de esos delitos y que el Diario mentía, debimos publicar en tapa la copia de la notificación personal que se le había efectuado a Etchevarren, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
Si haber dicho y demostrado, que el supuesto interés o preocupación de Etchevarren por la venta de droga en Dolores era sólo una campaña, ya que nada dijo ante la justicia cuando lo llamaron a declarar, es ser paranoico. Sí, soy paranoico. Si haber dicho y demostrado en base de las consultas de las causas penales obrantes en la Justicia Departamental, que no era cierto que Etchevarren y su comisario preferido metían presos a diez delincuentes por día, es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
"Si haber publicado que los tres pedidos de juicio político contra el Fiscal Escoda, habían sido impulsados por Etchevarren con el solo objetivo de que el mismo no fuera nombrado como Fiscal General. Que los mimos fueron redactados con idénticos términos, patrocinados por su hermana como abogada, certificadas las firmas el mismo día y por el mismo escribano, etc., es ser paranoico. Sí, soy paranoico".
"Si haber publicado que el Dr. Escoda en un escrito refiere de un procedimiento por drogas en un auto oficial, y del intento que habría hecho el jefe comunal ante ese funcionario para parar una investigación, es ser paranoico. Sí, soy un paranoico. Si debo reconocer y me debo reconocer como paranoico, por haberme manejado con información veraz, con copia de todo lo publicado y por hacer que la comunidad supiera lo que muchos sabían pero callaban o ocultaban".
"Si reitero, acepto que me puedan tildar de paranoico, lo que no acepto es que me traten de mentiroso, una condición sobre la que quizás Etchevarren se podría explayar con más autoridad, porque si algo que es cierto y comprobable, es que su gestión como intendente no resiste un archivo.
En cuanto a que soy una mala persona y que arrastro con mi proceder a otros, quizás tenga Etchevarren razón, y por eso me pareció importante para ello recordarle a nuestro mandamás:
Que si bien no hice campaña ni aporté dinero para que fuera Intendente, en el año 2005 siendo Etchevarren concejal hice un Proyecto que se denominó "Plan Solidario Municipal", a través del cual con parte de la dieta de los concejales se buscaba paliar en medio de la crisis la situación que vivían muchos dolorenses desocupados. Ese proyecto Etchevarren lo presentó como propio, pero yo conservo el original por si desea lo puedo publicar.
Que también siendo él concejal me pidió que lo ayudara a modificar la Ordenanza del Plan Toros, para poder presentarla en el Concejo como propia, ordenanza que era de mi autoría y presentado en 1987 (tengo el original si desea que lo publique). Que en 2007 y en plena campaña, una familiar directa suya trajo a este Diario una publicación que afectaba enormemente su candidatura, ante lo cual le avisé para que hablara con la misma y la retirara, lo que esta persona hizo (hay fotocopia).
Que electo intendente y durante muchas jornadas en casa de mi hijo, le aporté a Etchevarren y a su segundo Arrabit, toda mi experiencia como concejal y en su momento como intendente interino, para que organizara su gobierno, ya que no tenían idea de cómo iniciarlo y menos encaminarlo.
Y tanta fue mi ayuda porque ni Camilo Etchevarren ni su elenco sabían, que para crear la Jefatura de Gabinete yo elaboré el texto completo del decreto de su creación, el que luego mandó Etchevarren al Concejo Deliberante para ser ratificado (conservo el original por si tengo que publicarlo).
O cuando decidió presentarle un proyecto al gobernador Scioli proponiendo que los jueces fueran elegidos por el pueblo y me pidió que se lo redactara, porque nadie de los suyos sabía o quería hacerlo (si desea puedo publicar el original).
O para aquel 9 de Julio de 2009, cuando me llamó y me pidió que le redactara un saludo a la comunidad, el que llevó el título “Debemos recuperar aquella Patria grande” (si desea puedo publicar el original).
Quizás también deba recordarle también, cuando en marzo de 2008 y en la oficina que ocupaba el Dr. Arrabit me dijo que su recién iniciada administración tenía dos enemigos, su hermano y la Concejal Llona. El primero porque quería poner a un abogado amigo en el cargo de Jefe de Gabinete, y la segunda porque también pretendía serlo. Si lo ha olvidado, le recuerdo que le dije que tuviera precaución, que no apresurara decisiones, porque a ambas personas las necesitaba.
Habría otras muchas cosas más para recordar o contar, pero no lo creo conveniente en este momento. Lo que traigo hoy a colación no es para que Etchevarren me lo agradezca, sino para que busque cómo encuadrarlo en el mal hombre que dice que soy.
Pero y si en verdad lo soy, cabría preguntarme con respecto a Etchevarren cuando fue el momento en que comencé a ser “el malo”.
Y quizás ello ocurrió cuando le dije que no a su pedido para encabezar una lista, que apoyada por sus comerciantes amigos buscaría desplazar a Ezequiel Lauría de la presidencia de la Cámara de Comercio.
O cuando le avisé en febrero de 2009 que había un pedido para remover a los Comisarios Romero y Puig, por las extrañas circunstancias que rodeaban dos robos ocurridos en nuestra ciudad, uno en una joyería de la calle Mitre, desvalijada a pleno día y que debió cerrar definitivamente sus puertas, y el de los televisores de Casa Sampietro, cuando la policía tardó diez minutos para llegar al local desde la Comisaría, ubicada a cuatro cuadras del lugar, tras haber sido alertada. O cuando en julio de 2009 publiqué los allanamientos a la Comisaría y que se investigaba, quizás sin querer, rozando algún interés particular que no pude por entonces imaginar.
En cuanto al daño que según Etchevarren hice o hicimos desde el diario a personas, seguramente refiriéndose a los comisarios y sus familias. Y como parece que el intendente sufre de mala memoria o no tiene en su casa un espejo donde mirarse, debo recordarle o refrescarle algunos casos en particular que si no han sido conductas dañosas para con personas, no sé como calificarlo.
Como los empleados por él desplazados a funciones casi degradantes por no comulgar con su gestión. Un Arquitecto que actualmente es sereno; una Contadora Pública trasladada de Contaduría a la Biblioteca, o la secretaria de un bloque enviada por usted a trabajar a Hidráulica provincial. A aquellos muchos empleados que sin función específica o tareas designadas, se acumulan en una dependencia de deportes quizás, intentando con ello que renuncien. O la persecución puntual que hace a una persona bajo atención psiquiátrica. O el desalojo compulsivo de una moradora de una céntrica vivienda que recientemente intentó.
Recordarle la denuncia penal que hizo contra empleados municipales por daño, acusándolos de haber roto un cenicero en una movilización en su contra.
O los ascensos que anuló de dos personas promovidas por la anterior gestión, decisión que la justicia luego revocó.
El caso de los funcionarios judiciales y policiales que públicamente atacó durante más de año y medio, por su mentado interés en combatir la droga, quienes sufrieron igual o más que los que Etchevarren defiende.
O el caso del menor que realizaba tareas en un barrio de viviendas de la Municipalidad y sufriera quemaduras, y que más que ayuda recibió aprietes.
O el de la familia a la que se le quemó la humilde casilla y por haber reclamado ayuda a través del Diario, se pretendió con aprietes y promesas que cambiaran lo dicho.
Sería quizás un largo racconto de hechos o situaciones no gratificantes que también pueden calificarse como daño a personas, vividas todas a lo largo de la gestión Etchevarren y provocadas por la misma. Quizás podría seguir hablando de otros casos ayudado por archivo personal o del Diario, pero ello por lo extenso sería seguramente tedioso para nuestros lectores.
Y para terminar esta nota-respuesta, sólo me queda por decir que en algo coincido con Luis María Camilo Etchevarren, y es en que después de las elecciones se debe hablar, porque yo también tengo aún algo más para decir y no quisiera tomarlo por sorpresa".
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