El santafesino plantea visitas a San Nicolás, La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca, para apuntalar a Stolbizer, tal como hace Cobos desde la semana pasada. El socialista apuesta a una frente con la UCR para 2015 pero no quiere dividir el voto en el Congreso, como pasó con el canje de la deuda.
Hermes Binner no quiere ser menos que Julio Cobos y también acompañará en algunas recorridas a Margarita Stolbizer en la provincia de Buenos Aires, con la idea apuntalar su alicaída candidatura pero posicionarse como referente de un espacio nacional con vistas a 2015.
El santafesino acordó visitar San Nicolás y otras ciudades del noreste bonaerense, cercanas a Santa Fe, para luego visitar las tres localidades más importantes del interior de Buenos Aires: La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca.
Binner ya participó de un acto de campaña en Avellaneda antes de las primarias, pero tras el pobre resultado de las elecciones, el comité de campaña del Frente Progresista aceptó apelar a las dos principales figuras electorales para subir en las expectativas.
Su prematura visita a Avellaneda no fue casual: de ahí es oriundo el diputado Gerardo Milman, mano derecha de Stolbizer y su principal enlace con el ex gobernador.
Cobos empezó a recorrer la provincia la semana pasada en Pergamino y ahora llegará el turno de Binner, pero con una agenda por las ciudades más relevantes.
Ambos superaron los 40 puntos en sus provincias e instalaron la posibilidad de enfrentarse en una primaria nacional que los potencie para la general.
La sola mención de esa hipótesis aumentó los recelos en las diferentes filas y tuvo repercusiones en el Congreso. Hay pelea de todo tipo. Ernesto Sanz no abandona su idea de pelear por la presidencia, si es necesario sumándose a la interna.
Los socialistas aceptan una primaria ampliada pero antes piden cerrar acuerdos programáticos que los muestre unidos y capaces de coordinar una gestión. “No sirve acordar sólo un reparto de ministerios”.
En la primera semana legislativa fuerte post primarias no avanzó en ese sentido: el socialismo votó el contra del canje de deuda en el Senado y la UCR a favor, de la mano de Sanz. “Fue un grave error, en Diputados vamos a corregirlo”, adelanto un diputado del FAP a LPO.
Una de las más detractores de esa posición fue Laura Montero, la senadora de Cobos, quien de todos modos optó por aceptar la posición de Sanz pero le costó argumentarla en el recinto. Una escena que tal vez vuelva a repetirse el año próximo.
En diciembre, el socialismo podría quedar reducido a una cuarta minoría si no ensaya un interbloque con la UCR, superado por un peronismo disidente unido, liderado por Massa. Deberán negociar cómo seguir interactuando en noviembre. Y las conversaciones no parecen fáciles.
El santafesino acordó visitar San Nicolás y otras ciudades del noreste bonaerense, cercanas a Santa Fe, para luego visitar las tres localidades más importantes del interior de Buenos Aires: La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca.
Binner ya participó de un acto de campaña en Avellaneda antes de las primarias, pero tras el pobre resultado de las elecciones, el comité de campaña del Frente Progresista aceptó apelar a las dos principales figuras electorales para subir en las expectativas.
Su prematura visita a Avellaneda no fue casual: de ahí es oriundo el diputado Gerardo Milman, mano derecha de Stolbizer y su principal enlace con el ex gobernador.
Cobos empezó a recorrer la provincia la semana pasada en Pergamino y ahora llegará el turno de Binner, pero con una agenda por las ciudades más relevantes.
Ambos superaron los 40 puntos en sus provincias e instalaron la posibilidad de enfrentarse en una primaria nacional que los potencie para la general.
La sola mención de esa hipótesis aumentó los recelos en las diferentes filas y tuvo repercusiones en el Congreso. Hay pelea de todo tipo. Ernesto Sanz no abandona su idea de pelear por la presidencia, si es necesario sumándose a la interna.
Los socialistas aceptan una primaria ampliada pero antes piden cerrar acuerdos programáticos que los muestre unidos y capaces de coordinar una gestión. “No sirve acordar sólo un reparto de ministerios”.
En la primera semana legislativa fuerte post primarias no avanzó en ese sentido: el socialismo votó el contra del canje de deuda en el Senado y la UCR a favor, de la mano de Sanz. “Fue un grave error, en Diputados vamos a corregirlo”, adelanto un diputado del FAP a LPO.
Una de las más detractores de esa posición fue Laura Montero, la senadora de Cobos, quien de todos modos optó por aceptar la posición de Sanz pero le costó argumentarla en el recinto. Una escena que tal vez vuelva a repetirse el año próximo.
En diciembre, el socialismo podría quedar reducido a una cuarta minoría si no ensaya un interbloque con la UCR, superado por un peronismo disidente unido, liderado por Massa. Deberán negociar cómo seguir interactuando en noviembre. Y las conversaciones no parecen fáciles.
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