Randazzo desoye el pedido de la Rosada y vuelve a atacar a Scioli

El ministro no le da tregua al gobernador y volvió a acusarlo de “menemista”. Aní
bal le había pedido que baje el tono.

Florencio Randazzo no quiere tregua. El precandidato presidencial desoyó el pedido de la Casa Rosada y parte del kirchnerismo, y volvió a embestir duramente contra Daniel Scioli, a quien acusó de menemista y de no creer en la
gestión.

El ministro del Interior y Transporte volvió a apuntar hoy contra su rival en la in
terna del Frente para la Victoria, pese a que poco antes Aníbal Fernández le había
pedido que baje el tono, algo que repitieron otros dirigentes del kirchnerismo.

Randazzo tampoco parece haber tomado nota del pedido que hizo Scioli ayer a sus funcionarios. Como reveló LPO, el gobernador ordenó frenar los ataques que ha
bían lanzado el lunes y martes, con inusitada dureza. El propio Scioli se mostró ano
che en una entrevista televisa y eludió responderle al ministro.

"No me parece ser agresivo decir que Scioli irrumpe en la política en la década de
los '90 con los deportistas famosos. La pregunta que me hago es si esto es cierto o
 es falso. Y es cierto. Y también es cierto que en realidad Scioli cree poco en la ges
tión", sostuvo Randazzo durante una visita a La Plata

"Decir la verdad no implica ser agresivo. Me parece que también eso es parte de un
 discurso único que intenta proteger la impunidad que se le da a determinados can
didatos, y que impiden que nosotros digamos lo que pensamos y/o que queremos"
, agregó el ministro .

El martes, ambos dirigentes se mostraron distantes en un acto que compartieron
con Cristina Kirchner en Ezeiza. La Presidenta mandó un mensaje de distensión al
 elogiarlos por igual, e incluso mostrarse mucho más cálida de lo habitual con Scioli.

El gesto de Cristina se condice con las palabras de Aníbal Fernández, quien hoy con
sideró “saludable” haber bajado el tono a la interna, algo que parecía haber sucedi
do ayer. El jefe de Gabinete les pidió discutir políticas públicas y “no chiquilinadas”. Asimismo, repitió que a esas discusiones “la sociedad las va a sancionar”, porque
“no les gusta que en vez de preocuparse por todos lo hagan por uno mismo".

El discurso pacifista tuvo eco en otros dirigentes kirchneristas como el ministro de
Defensa, Agustín Rossi. El también precandidato dijo que las declaraciones cruzadas
 “no ayudan” y opinó que "los adversarios a la continuidad del proyecto iniciado en
2003 son los candidatos de la derecha".

Algo similar dijo la jefa del bloque de diputados kirchneristas, Juliana Di Tullio. La legisladora dijo que la discusión “está bien” y no le parece “una cosa espantosa”, pe
ro “si pudiera ser con un tono más bajo sería mejor". “Esta etapa hay que hacerla
con un tono un poco más amistoso, no tan guerrero”, pidió.

Las declaraciones llamando a bajar el tono coincidieron con otros gestos de disten
sión del kirchnerismo, como los que lanzaron ayer Héctor y Mariano Recalde, am
bos abriéndole totalmente la puerta a Scioli para que compita en la interna del FPV.

Ayer, el sciolismo bajó un cambio luego del pedido del gobernador. “Había que ha
cerlo porque estaba dañando al proyecto. Pero si seguimos, va a terminar siendo
 funcional a Macri”, les dijo Scioli a sus funcionarios, a quienes les ordenó concen
trarse en temas de gestión.